lunes, 30 de septiembre de 2013

ITALIA BAJO CHANTAJE.



Desde la perspectiva de nuestra concepción del Estado de Derecho y del significado de los valores democráticos, y como ciudadanos europeos que somos, no podemos permanecer indiferentes ante la situación que padecen las instituciones políticas italianas, sometidas al indecente chantaje de un personaje político que ha degradado durante las últimas décadas la vida política y social italiana, y cuya eliminación de la política activa, como resultado de las condenas judiciales recibidas, constituye una necesidad inaplazable para la restauración de la normalidad democrática en Italia.

Resulta intolerable que un político condenado por la justicia e inhabilitado para el ejercicio de cargos públicos anteponga sus intereses personales al correcto funcionamiento institucional del Estado, y pretenda unir su suerte personal a la de las propias instituciones democráticas, haciendo imposible su estabilidad y continuidad si no se le garantiza la imposible inmunidad frente a sus condenas judiciales.

No se puede estar por encima de las leyes ni se puede aspirar a ejercer una función política desde el desprecio a la legalidad, a la acción de la justicia y al conjunto de las instituciones democráticas, amparándose en el control de un imperio mediático que deforma a la opinión pública y en el servilismo incomprensible de quienes militan en un partido político que se llama, paradójicamente, el Pueblo de la Libertad, cuando a diario hacen un ejercicio de sumisión indigna al Líder, anteponiendo su voluntad y sus incalificables caprichos al servicio a los ciudadanos italianos y a los intereses generales del país.

Por el bien de Italia y de Europa, esperamos que las instituciones democráticas italianas y quienes, de verdad, ejercen una función política con convicciones firmes de servicio a los ciudadanos sepan desembarazarse de forma definitiva de un personaje patético, que está poniendo punto final a su trayectoria de indecencia al dejar al descubierto toda su bajeza personal y política.

viernes, 27 de septiembre de 2013

EL GOBIERNO DE ESPAÑA CUMPLE CON LA PRESENTACIÓN DE LOS PRESUPUESTOS. ¿Y EL GOBIERNO DE ARAGÓN?



El Consejo de Ministros de hoy ha aprobado el Proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado, de manera que su remisión al Congreso de los Diputados, para su tramitación parlamentaria, se hará antes del 1 de octubre, dando con ello cumplimiento a lo previsto en el artículo 134.3 de la Constitución Española: “El Gobierno deberá presentar ante el Congreso de los Diputados los Presupuestos Generales del Estado al menos tres meses antes de la expiración de los del año anterior”. Dado el carácter anual de los Presupuestos, su expiración se produce con el final del ejercicio, de manera que la presentación ha de efectuarse antes del último trimestre del mismo, es decir, con anterioridad al 1 de octubre.

Los poderes públicos han de ajustar su actuación a lo dispuesto en el ordenamiento jurídico, como resulta obligado en un Estado de Derecho, y la primera norma a respetar por parte del Gobierno ha de ser, necesariamente, la Constitución. Actuar de otro modo sería restar valor al principio de legalidad y considerar disponibles por parte de los poderes públicos los mandatos constitucionales, cosa que en modo alguno está al alcance de autoridades públicas ni ciudadanos.

El cumplimiento de las normas es la primera obligación exigible a cualquier responsable gubernamental, pues la legitimidad de origen que le confiere su forma de constitución –la confianza otorgada por el Parlamento en el caso del Gobierno, a través de la investidura de su Presidente- debe verse acompañada por la legitimidad de ejercicio que se obtiene mediante una actuación respetuosa del ordenamiento jurídico, pues la ley ha de entenderse como un límite infranqueable para quienes ejercen cualquier tipo de poder político. Lo contrario nos situaría fuera de nuestro modelo constitucional de Estado de Derecho.

El hecho de que los poderes públicos se ajusten a las normas supone la mejor pedagogía para los ciudadanos de una democracia, pues difícilmente cabe esperar o reclamar un comportamiento cívico y respetuoso de las leyes cuando las autoridades incurren de forma reiterada en su vulneración.

El Gobierno de Aragón, a su vez, debe ajustar la aprobación del Proyecto de Ley de Presupuestos de la Comunidad Autónoma de Aragón a lo establecido en el Estatuto de Autonomía de Aragón, cuyo artículo 111.4 dispone: “El Gobierno remitirá a las Cortes de Aragón el proyecto de presupuesto antes del último trimestre del ejercicio en curso”.

En los últimos años, el Gobierno de Aragón ha incumplido de forma manifiesta el plazo de presentación requerido por el Estatuto de Autonomía, y esta Asociación se ha dirigido en todas las ocasiones al Justicia de Aragón para que recuerde al Gobierno de Aragón la obligación de respetar el Estatuto de Autonomía, sin que hasta la fecha se haya resuelto ninguna de las quejas planteadas por vulneración del Estatuto, pese al tiempo transcurrido. Es evidente que este año corremos nuevamente el riesgo de que el Gobierno de Aragón vuelva a ignorar las fechas exigidas por el Estatuto de Autonomía, otorgándose a sí mismo de manera antijurídica un plazo distinto al establecido por el Estatuto de Autonomía, desconociendo con ello lo que implica ejercer el poder político en un Estado de Derecho. Veremos lo que sucede, pero en el caso de rebasarse nuevamente el plazo legal, esta Asociación formulará nueva denuncia ante el Justicia de Aragón, sin perjuicio de que la misma no sea nunca resuelta, pues el peor escenario posible, más grave incluso de que el poder político incumpla las leyes, es que los ciudadanos sean indiferentes a dicho incumplimiento.

CORRUPCIÓN EN PLAZA: SIN VOLUNTAD DE CONTROL NI DE RENDICIÓN DE CUENTAS.



La mayoría parlamentaria ha rechazado la iniciativa del grupo de Izquierda Unida para la constitución de una comisión de investigación sobre las irregularidades detectadas en PLAZA, S.A. La iniciativa se concretaba en una proposición no de ley –dirigida al impulso de la acción del Gobierno- para que el Gobierno de Aragón, como sujeto legitimado por el Reglamento de las Cortes de Aragón para solicitar la constitución de una comisión de investigación, instase su creación. Los dos Grupos de la mayoría gubernamental –el Grupo Parlamentario Popular y el del Partido Aragonés- rechazaron tal proposición, volviendo al pobre argumento de que hay que dejar actuar a la justicia, sin interferir en su labor.

Ese rechazo a la iniciativa parlamentaria del Grupo de Izquierda Unida coincide con la respuesta dada desde la Comisión de Comparecencias y Peticiones Ciudadanas a la petición planteada por esta Asociación para que se promoviese una comisión parlamentaria de investigación sobre la irregular gestión de la empresa pública PLAZA, S.A. Según comunica a esta Asociación la Presidenta de dicha Comisión, Ana Marín Pérez, “la Mesa de las Cortes, en sesión de fecha 4 de septiembre de 2013, acordó la remisión de su escrito a la Comisión de Comparecencias y Peticiones Ciudadanas. La Mesa de la Comisión de Comparecencias y Peticiones Ciudadanas, en sesión celebrada el día 13 de septiembre de 2013, ha acordado remitir su escrito a los distintos Grupos Parlamentarios para que, al ser ellos los principales sujetos parlamentarios legitimados (como tales o a través de los diputados que los componen) para proponer al Pleno la creación de una comisión de investigación (art. 64.1 del Reglamento de las Cortes de Aragón), valoren la procedencia y, en su caso, presenten la pertinente propuesta”.

Es penoso –pues no hay otro calificativo- que la actuación de la Mesa de las Cortes de Aragón y de la Comisión de Comparecencias y Peticiones Ciudadanas, como órganos de gobierno y de funcionamiento del Parlamento aragonés, ante una petición de comisión de investigación sobre el principal caso de corrupción pública que afecta al Gobierno de Aragón –como responsable de la dirección del sector público empresarial- se inhiban y se limiten a remitir la propuesta a los Grupos Parlamentarios, a los que ya se dirigió directamente esta Asociación, sin necesidad de intermediarios. Esa remisión equivale a un mero archivo, sin debate, de la propuesta, y a una incomprensible y reprochable negativa a impulsar los mecanismos de control parlamentario sobre la actuación del Gobierno.

Es evidente que no existe voluntad de control político, renunciando con ello a una de las principales señas de identidad de un sistema democrático, y todo pretende remitirse a los mecanismos del Estado de Derecho –es decir, al sometimiento de la gestión pública al control de los Tribunales, pues mientras no haya sentencias todo ha de entenderse correcto y los gestores sospechosos de negligencia o de enriquecimiento ilícito pueden seguir acogiéndose a la presunción de inocencia-, pero tal opción de posibiliar la acción de la justicia sería más creíble si la propia Comisión parlamentaria de Investigación, tras la realización de su trabajo de información, fuese la que remitiera al Ministerio Fiscal sus conclusiones, ante los posibles indicios de ilícito penal.

Todo lo sucedido pone de manifiesto la baja calidad democrática de nuestras instituciones –tanto del Gobierno de Aragón como de las Cortes de Aragón- y el escaso compromiso con valores esenciales para toda institución pública, cuya legitimidad procede en exclusiva de los ciudadanos, como son el control y la rendición de cuentas. Tanto el Gobierno como la mayoría parlamentaria que lo sustenta han dejado clara su voluntad de no activar los cauces parlamentarios de control y rendición de cuentas frente a la corrupción pública detectada en el sector empresarial autonómico.

La señal enviada a los ciudadanos no puede ser más negativa, por más que confiemos en que la Fiscalía Anticorrupción sepa llegar hasta las últimas responsabilidades penales que concurran en el caso, desentrañando las redes de intereses espúreos tejidas al amparo de la opacidad y de la falta de ética que ha dominado la gestión del sector público autonómico. La responsabilidad penal, sin embargo, no coincide con la responsabilidad política y los ciudadanos, en una democracia, no pueden admitir que los asuntos públicos los gestionen personas que se consideran irresponsables frente a ellos.

EL JUSTICIA DE ARAGÓN REITERA SU PETICIÓN DE INFORME AL AYUNTAMIENTO DE ZARAGOZA CON MOTIVO DE LA QUEJA POR FALTA DE OFERTA DE EMPLEO.



En una reciente comunicación del Justicia de Aragón a esta Asociación, de fecha 17 de septiembre de 2013, el titular de dicha Institución comunica que por parte del Ayuntamiento de Zaragoza no se ha emitido el informe solicitado el pasado mes de julio de 2013 en relación con la queja planteada por esta Asociación por la falta de aprobación de Oferta de Empleo Público, con la que asegurar el derecho de acceso de los ciudadanos a la función pública, reconocido en el artículo 23.2 de la Constitución Española y desarrollado por el Estatuto Básico del Empleado Público.

Ante la falta de respuesta, el Justicia de Aragón informa a esta Asociación de que vuelve a solicitar al Ayuntamiento de Zaragoza informe sobre la cuestión planteada en la queja, y de que, en el momento en que disponga de noticias al respecto, se pondrá nuevamente en contacto con nosotros.

Es llamativa la falta de diligencia de las Administraciones Públicas en atender los requerimientos de información por parte de instituciones de control como el Justicia de Aragón, que obligan a éstas a reiterar una y otra vez sus demandas de información. Nuevamente, debemos recordar la obligación que incumbe a todo responsable público de colaborar con la labor de control del Justicia de Aragón, de manera que la obstrucción al desarrollo de su función puede ser motivo de responsabilidad penal, al estar tipificada tal conducta como un delito contra las instituciones del Estado.

Sería grave el hecho de que a una vulneración del derecho de acceso a la función pública que corresponde a los ciudadanos, en la que se incurre con la no aprobación de la Oferta de Empleo Público, una institución como el Ayuntamiento de Zaragoza añadiera una conducta de falta de colaboración con el Justicia de Aragón, en el desempeño de su labor de protección de los derechos de los ciudadanos, con las consecuencias que ello puede acarrear. Al mismo tiempo, debemos recordar que el Alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, tampoco ha acusado recibo ni ha contestado a la petición realizada por esta Asociación el pasado mes de julio, al amparo del artículo 29 de la Constitución Española, en la que se solicitaba la aprobación de la correspondiente Oferta de Empleo Público para 2013, dando con ello cumplimiento a las previsiones establecidas en el Estatuto Básico del Empleado Público.

Esta Asociación no va a desistir en su empeño de reclamar de las Administraciones Públicas el escrupuloso respeto al derecho fundamental de acceso a la función pública en condiciones de igualdad que la Constitución Española reconoce a los ciudadanos, y del cual no pueden verse privados por la actuación irregular y arbitraria de los responsables políticos de las diferentes instituciones.

jueves, 26 de septiembre de 2013

CAMPAÑA EN EL SENADO PARA MEJORAR LA LEY DE TRANSPARENCIA.



Reproducimos en este blog la información relativa a la campaña que distintas organizaciones de la sociedad civil han promovido para tratar de mejorar el contenido del Proyecto de Ley de Transparencia en su tramitación por el Senado. Toda vez que la Asociación para la Defensa de la Función Pública Aragonesa forma parte de la Coalición Pro Acceso, que defiende el derecho a saber o acceder a la información pública, damos apoyo a dicha campaña, con su difusión en nuestro blog.

MEJORAR LA LEY DE TRANSPARENCIA.

Madrid, 26 de septiembre de 2013 - El día 28 de septiembre es el Día Internacional del Derecho a Saber y lo queremos celebrar. España está aprobando en estos momentos una Ley de Transparencia (¡por fin!) y la sociedad civil está siguiendo este proceso muy de cerca para conseguir que esa norma esté a la altura de las mejores leyes del mundo.

Sin embargo, tras pasar por el Congreso de los Diputados, la ley no es buena. Seguiremos sin poder saber cómo toman sus decisiones los políticos, un ejemplo representativo es la pregunta de si es más barato privatizar la sanidad o por qué hay que pagar una tasa por generar energías renovables.

Ahora le toca al Senado decidir el futuro de la transparencia, por eso vamos hablar con nuestros senadores.

Contactar con un/a senador/a y ayudar a mejorar la Ley de Transparencia no es difícil:

Elige a un/a senador/a de tu provincia y ponte en contacto con él/ella directamente a través de esta página. Puedes intentar quedar en persona o directamente enviar un mail (marca en esta lista el senador que elijas).

Explícale por qué queremos cambios en la Ley de Transparencia (lee esta propuesta de mail que puedes usar para imprimirlo y dárselo en persona o enviárselo o simplemente para tener más información y hablar con tu senador/a)

Pregúntale cuál es su postura y cuéntanos qué te ha dicho (puedes contárnoslo en la misma lista donde apuntamos todos los nombres)
¡Cuantas más personas hablemos con los senadores podremos conseguir un compromiso para mejorar la transparencia en España!
Si apoyas la campaña, difúndela en Facebook, Google+, Twitter, identi.ca... con el hashtag #senadotransparente

Si quieres saber más, sigue leyendo.

Nueve años esperando una ley de acceso a la información

Hace 9 años que se prometía en España por primera vez la aprobación de una ley de acceso a la información. Desde entonces la sociedad civil, a través de la Coalición Pro Acceso y otras organizaciones, ha luchado por defender que la futura norma garantice el derecho de acceso a la información y que España sea uno de los países con mejores leyes de transparencia.

Por fin hay un Proyecto de Ley de Transparencia, Acceso a la Información y Buen Gobierno que acaba de pasar su primera etapa parlamentaria y se ha enviado al Senado.
El problema es que esta ley está lejos de ser "vanguardista" tal y como prometía el Gobierno del Partido Popular y es, en realidad, una ley débil que dejaría a España en la posición 72 de 96 países con leyes de transparencia en el mundo, según el análisis de la Organización Access Info Europe (puedes leer el análisis aquí).

¿Qué podemos hacer?

Durante todos estos años la sociedad civil ha mantenido reuniones con los diferentes gobiernos y con los diputados para presentarles nuestro punto de vista (definido en los 10 principios de la Coalición Pro Acceso y basado en los estándares internacionales en la materia). Ahora vamos a hablar con los senadores.

Lo cierto es que hasta la fecha no hemos tenido suerte y nuestro mensaje no ha calado. Si bien el Proyecto de Ley de Transparencia ha mejorado en algunos aspectos desde que se presentó como anteproyecto el día 26 de marzo de 2012, estas modificaciones no van en la línea con lo que pedía la sociedad civil y se han limitado a introducir algunos "cambios cosméticos", tal y como señalaba la OSCE en su análisis del texto español.

El Senado, al igual que el Congreso de los Diputados, es una institución en la que reside la soberanía del pueblo español, ejercida a través de los senadores elegidos por las personas con derecho a voto.

Mucha gente opina que el Senado no sirve para nada, pero eso no es cierto. El Senado interviene en la elaboración de las leyes y puede realizar cambios importantes. Por eso vamos a hablar con ellos.

Elige un/a Senador/a de la lista y ponte en contacto con él/ella a través del correo electrónico, Twitter, Facebook, por teléfono o incluso solicita una entrevista cara a cara (los datos de contacto también están en la lista).

La idea es entregarles la documentación donde se dan argumentos a favor de una mejor Ley de Transparencia y comentarla con ellos/ellas.

Queremos que los senadores expresen públicamente su opinión y nos digan si van a proponer cambios sustanciales a la futura ley. Cuando consigas una respuesta, por favor háznoslo saber para tener un mensaje unificado a favor de la transparencia.

¿Qué vamos a pedir?

Además de entregar el análisis de la ley desarrollado por Access Info Europe (puedes encontrarlo aquí), hay algunos puntos que consideramos esenciales para conseguir una garantía del derecho de acceso a la información:
1. El reconocimiento del derecho de acceso a la información como un derecho fundamental.
2. Que la ley no excluya de su alcance tipos de información.
3. Que el organismo que vigile la transparencia sea independiente y tenga poder vinculante.

Te proponemos un texto en el que desarrollamos estos tres puntos que puedes usar para mandarlo en un email a tu senador/a o te puede servir de guía para preparar tu propio texto. Puedes leerlo file_pdffile_doc

¿Por qué queremos participar?

La necesidad de transparencia es algo que en España ya nadie duda, esta ley es muy importante porque su ambición va a definir el techo al que queremos llegar en materia de transparencia.

Podemos elegir entre el texto que tenemos, que limita la transparencia a tener mayor claridad sobre las cuentas del estado o podemos luchar para que la ley se modifique y afecte a toda la actividad pública: Que explique cuánto cuestan, quién ha tomado las decisiones, por qué y cómo.

¡Ahora vamos a contárselo a los senadores!

Organizaciones promotoras de "Buscamos al senador/a más transparente"
·Access Info Europe. http://www.access-info.org/
·Fundación Ciudadana Civio. http://www.civio.es/
·Qué hacen los diputados. http://quehacenlosdiputados.net
·Open Knowledge Foundation-España. http://es.okfn.org/
·OpenKratio. http://openkratio.org/
·ProyectoAvizor/CIEDCODE.http://unmundosalvadorsoler.org/ciecode/avizor/

UTILIZACIÓN COMO ARMA ARROJADIZA.



Como era de prever, la comparecencia del Consejero de Hacienda y Administración Pública, José Luis Saz, ante las Cortes de Aragón que tuvo lugar ayer, apenas arrojó datos positivos sobre el posible futuro de la función pública aragonesa. Considerar que la acción en materia de ordenación de la función pública pueda agotarse en una actualización apresurada y sin criterio de las relaciones de puestos de trabajo y en la realización igualmente apresurada de unos concursos de méritos para la provisión de puestos singularizados constituye una visión muy limitada de las necesidades de la función pública.

Cuando la aplicación de las normas –actualizar anualmente las relaciones de puestos de trabajo o realizar las convocatorias de provisión de los puestos de trabajo en los plazos que marca la normativa- constituye todo el balance de la política de recursos humanos de un Gobierno al alcanzar el ecuador de una legislatura se trasluce claramente la falta de proyecto y de ambición, pero también de compromiso y responsabilidad, en materia de función pública.

Las intervenciones tanto del Consejero como de los portavoces de los diferentes Grupos Parlamentarios resultaron particularmente decepcionantes, pues todas ellas evidenciaron la falta de reflexión sobre el modelo de función pública que requiere la Administración autonómica para superar vicios como los que saltan a la vista a cualquier observador medianamente atento.

De poco sirve reclamar o prometer una Ley si no se es capaz de definir los objetivos que han de alcanzarse con la nueva regulación, más allá de expresiones retóricas, como la racionalización o la eficiencia o la mejora de la calidad. Ningún portavoz parlamentario, tampoco el Consejero, pudo precisar aspectos que debieran contemplarse en la futura normativa. Una Ley no se reduce a plazos de elaboración, sino a contenidos y objetivos, y de esto último nada pudo oirse ayer a ninguno de los intervinientes.

A los miembros de esta Asociación no pudo pasarles desapercibida la utilización que, por una y otra parte del debate, se hizo de las afirmaciones y logros de esta Asociación.

El Consejero Saz quiso descalificar la gestión del anterior Ejecutivo esgrimiendo las sentencias obtenidas por esta Asociación en las que se anularon las Ofertas de Empleo Público de 2007 y 2011, por vulnerar el derecho fundamental de acceso a la función pública. Pero calló, y nadie acertó a recordárselo, que su Departamento se resistió a la ejecución de ambas sentencias, viéndose obligada esta Asociación a reclamar la ejecución forzosa de las mismas ante el Tribunal Superior de Justicia de Aragón. Por lo tanto, no es este Gobierno el que ha asegurado el restablecimiento de la legalidad en materia de oferta de empleo público, sino exclusivamente los Tribunales, pese a que los Servicios Jurídicos de la Administración trataron de evitar, ha de entenderse que por instrucciones del Consejero Saz, tal ejecución.

Por parte de la portavoz del Grupo Socialista también se apeló –sin nombrarla- a esta Asociación para atacar la política de personal del actual Gobierno, utilizando para ello fragmentos de alguno de los escritos dirigidos a los Grupos Parlamentarios en que se denunciaba la falta de aprobación de Oferta de Empleo Público en 2012 y 2013, o de alguna de las notas del blog de esta Asociación. Todo ello sin citar la fuente de manera adecuada, aludiendo a esta Asociación como “unos funcionarios”. Sin duda lo somos, pero el escrito dirigido a su Grupo Parlamentario lo firmaba el Presidente de esta Asociación, precisamente la misma Asociación que obtuvo –frente a la Administración y a los sindicatos mayoritarios- las sentencias a las que apelaba el Consejero Saz para acreditar la irregular política de personal del anterior Gobierno.

Esta Asociación no puede dejar de lamentar que el esfuerzo por restaurar la legalidad en materia de función pública, frente a los responsables de ayer y de hoy, sea utilizado como simple arma arrojadiza en un debate parlamentario, en el que la confrontación política no dejó espacio para esbozar las líneas de acción necesarias para fortalecer la profesionalidad de la función pública aragonesa.

miércoles, 25 de septiembre de 2013

COMPARECE EN LAS CORTES DE ARAGÓN EL CONSEJERO DE HACIENDA Y ADMINISTRACIÓN PÚBLICA, PARA HABLAR DEL EMPLEO PÚBLICO.



De acuerdo con la agenda de la actividad parlamentaria de las Cortes de Aragón, hoy está prevista la comparecencia del Consejero de Hacienda y Administración Pública, José Luis Saz, a petición de 6 Diputados del Grupo Parlamentario Socialista, al objeto de informar sobre la política de empleo público en la Administración de la Comunidad Autónoma, disminución del número de empleados públicos y su repercusión en la atención a los aragoneses, así como las medidas adoptadas en relación con los recursos humanos de la Diputación General de Aragón.

Desde esta Asociación estaremos atentos a lo que el responsable de la política de recursos humanos del Gobierno de Aragón pueda informar sobre el proceso de tramitación del Anteproyecto de Ley de la Función Pública de Aragón –respecto al cual esta Asociación formuló en fecha reciente sus observaciones, solicitando una revisión de elementos esenciales del mismo- y sobre las condiciones en que se halle la necesaria ejecución de las sentencias del Tribunal Supremo y del Tribunal Superior de Justicia de Aragón que anularon las Ofertas de Empleo Público de 2007 y 2011, y que obligan a la aprobación de nuevas Ofertas en las que se incluyan la totalidad de los puestos de trabajo vacantes ocupados por funcionarios interinos que no recogieron en su día.

Es más que previsible que la comparecencia de hoy se limite a una exposición de medidas de contención del gasto público y a una exposición de la que parece ser única línea de actuación de la Dirección General de la Función Pública y Calidad de los Servicios –como es la realización de los concursos de méritos en los puestos singularizados para reducir el índice de provisionalidad-, pero es muy probable que la verdadera necesidad de profesionalización de la función pública y de optimización del personal público –aprovechando al máximo su enorme potencial- esté ausente en las intervenciones de los diferentes intervinientes en el debate de esta mañana.

La situación del empleo público debiera ser, de existir un compromiso real de los responsables políticos –tanto del gobierno como de la oposición- con el respeto de la legalidad, una prioridad y un ámbito de amplio acuerdo para mejorar la calidad de la Administración Pública, pero poco cabe esperar cuando la situación de incumplimiento de las normas de función pública que hemos sufrido y seguimos sufriendo es responsabilidad, en gran medida, de quienes gobernaron en pasadas legislaturas, vulnerando el derecho fundamental de acceso de los ciudadanos a la función pública como han declarado los Tribunales.

Los ciudadanos y los servidores públicos merecemos que el debate sobre el empleo público de la Comunidad Autónoma se realice desde una visión institucional que reconozca a la función pública la significación y la importancia que le corresponde en un Estado de Derecho y en una Administración prestadora de servicios públicos esenciales para toda la población. Ojalá que en la mañana de hoy pudiéramos ver algún atisbo de que ese debate pueda ser una realidad en un futuro próximo.

martes, 24 de septiembre de 2013

CONVOCATORIA DE LA JUNTA DIRECTIVA DE LA ASOCIACIÓN: 3 DE OCTUBRE.



De acuerdo con lo decidido por la Asamblea General de la Asociación, y con el fin de posibilitar la máxima participación de los socios en los debates de sus órganos directivos, la celebración de las reuniones de la Junta Directiva se hallan abiertas a la participación de todos los socios que deseen asistir a las mismas, en las que podrán participar con voz pero sin voto en el debate de los diferentes puntos del orden del día propuesto.

Además, y con el fin de asegurar la máxima transparencia en la actividad de la Asociación, de cara al conjunto de sus socios y de la ciudadanía en general, las convocatorias de la Junta Directiva son objeto de publicación en el blog de la Asociación, permitiendo con ello no sólo el conocimiento general de los asuntos a tratar, sino también la aportación de ideas y comentarios a los puntos incluidos en el orden del día, enriqueciendo con ello el debate interno de la Junta Directiva.

En consecuencia, se procede a la convocatoria de la reunión de la Junta Directiva de la Asociación, correspondiente al jueves 3 de octubre

CONVOCATORIA:

De acuerdo con lo señalado en el artículo 17 de los Estatutos, se convoca reunión de la Junta Directiva, a celebrar el próximo día 3 de octubre, a partir de las 19:00 horas, en los locales de la Junta Municipal Centro, sitos en la calle Hernán Cortés, 33, proponiéndose el siguiente


Orden del día:


  1. Aprobación, si procede, del orden del día.
  2. Aprobación, si procede, del acta de la reunión anterior.
  3. Informe de actividad por parte del Presidente.
  4. Iniciativa para la eliminación de las tasas de reposición en el Proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2014.
  5. Repaso de situación del ejercicio del derecho de petición.
  6. Propuesta para el impulso del buen gobierno corporativo en las empresas públicas de la Comunidad Autónoma.
  7. Ruegos y preguntas.


Zaragoza, 24 de septiembre de 2013.
El PRESIDENTE DE LA ASOCIACION
Julio Guiral Pelegrín

NO FALSEAR LOS DEBATES.



Las cuestiones que afectan a la comunidad deben ser objeto de deliberación pública, con el fin de adoptar posibles decisiones tras un debate racional. Debatir la naturaleza y alcance de los problemas que nos afectan y buscar las soluciones más idóneas a los mismos es el contenido propio de la discusión ciudadana. Para ello, debe evitarse la comodidad de la inhibición –el desentenderse de aquello que concierne a todos- y debe también excluirse el falseamiento deliberado de la realidad, pues ello hace que el debate público resulte falaz e infructuoso.

La pasividad, con frecuencia, contribuye a agravar los problemas o a consolidar las irregularidades, haciendo luego más difícil su corrección. Vemos la dificultad que supone, dada la dimensión del problema, corregir la temporalidad en la función pública o tratar de reducir la provisionalidad en el desempeño de los puestos de trabajo. Cuando el funcionamiento ordinario de los sistemas de selección o provisión no se produce, los procedimientos extraordinarios conllevan necesariamente efectos indeseados tanto sobre la situación de las personas afectadas como sobre la propia organización, que se ve sometida a tensiones inusuales.

Confiamos en que los numerosos debates que hemos de mantener para sacar adelante una ordenación de la función pública y una puesta a punto de la Administración Pública, que sirva al interés general y actúe como la estructura propia de un Estado de Derecho, tengan lugar y se ajusten a las condiciones necesarias para que resulten útiles, de modo que posibiliten el libre intercambio de planteamientos y las aproximaciones suficientes para hallar las fórmulas más adecuadas.

No ha de escatimarse esfuerzo de análisis, capacidad de razonamiento y de diálogo y claridad en la definición de los objetivos a alcanzar, pero en particular debemos desprendernos del lastre del escepticismo y del fatalismo que nos llevan a pensar, equivocadamente, que las cosas no tienen solución y que no hay remedio al nivel de deterioro alcanzado por nuestras instituciones públicas. Nadie puede participar en un debate positivo desde el convencimiento de que no hay solución posible a la insatisfactoria situación actual.

lunes, 23 de septiembre de 2013

PARTICIPACIÓN DE LA ASOCIACIÓN EN UN REPORTAJE DE HERALDO DE ARAGÓN: NECESARIA REVISIÓN DEL SECTOR PÚBLICO EMPRESARIAL.




Ayer publicó Heraldo de Aragón un reportaje sobre los sueldos de los directivos de las empresas públicas de la Comunidad Autónoma de Aragón, cuestión sobre la que no existe la transparencia debida a todo gasto público –la Ley de Presupuestos publica las retribuciones de los miembros del Gobierno de Aragón y de los altos cargos de la Administración autonómica, pero no recoge las retribuciones de los directivos del sector público empresarial, cuya fijación corresponde determinar al Gobierno de Aragón, según establece el artículo 87.3 de la Ley de la Administración de la Comunidad Autónoma-, y cuyos datos únicamente han sido conocidos –de modo parcial- como resultado del control parlamentario de los grupos de oposición.

Para dicho reportaje se requirió una colaboración por parte de nuestra Asociación, que no quisimos centrar exclusivamente en el tema retributivo de los directivos de las empresas, sino abordar la necesaria y urgente revisión del modelo de gobierno corporativo del sector empresarial público, racionalizando su estructura y reforzando su profesionalidad y eficiencia, en la línea fijada por las directrices aprobadas por la OCDE en 2011, a partir de las cuales está Asociación llevará a cabo distintos iniciativas y propuestas en los próximos meses.

Constituye una satisfacción el hecho de que esta Asociación haya sido invitada a expresar su opinión sobre el sector empresarial, junto a la de otros expertos, de los campos de la economía y el derecho administrativo, pues ello supone un reconocimiento al trabajo que se viene desarrollando, desde hace siete años, a favor de una Administración y una función pública comprometidas con los principios constitucionales de legalidad, eficacia y servicio al interés general.

Reproducimos, a continuación, el texto íntegro de la colaboración de esta Asociación recogida ayer en el reportaje de Heraldo de Aragón:

“URGE UNA REVISIÓN.

El sector empresarial autonómico experimentó en legislaturas pasadas un crecimiento exponencial, con voluntad deliberada de sustituir a la función pública profesional en determinados ámbitos de la gestión pública. En lugar de una función pública imparcial, garante de la legalidad, se optaba por empresas tuteladas políticamente con fines no siempre coincidentes con el interés general. Dicha expansión, sorprendentemente, no fue cuestionada desde la iniciativa privada, pese a alterar en muchos casos las reglas de competencia del mercado.

La selección del personal de las nuevas empresas se efectuó al margen de procesos ajustados a principios de igualdad, mérito y capacidad, eludiendo todo control de objetividad, negándose información sobre dicho personal a las Cortes de Aragón. Con ello se creaba un ámbito de gestión opaco y exento del control democrático. La opacidad afecta, también, a los sueldos de los directivos, cuyas cuantías no figuran en las leyes de presupuestos y se fijan libremente por el Gobierno de Aragón.

La dirección de las empresas públicas se atribuye a consejos de administración integrados por políticos –del gobierno y de la oposición- y altos cargos, en contra de los criterios de profesionalidad e independencia que propugna la OCDE, para evitar interferencias políticas en su gestión.

Urge una profunda revisión del sector público autonómico, que permita racionalizar y adecuar su gestión a las Directrices de Gobierno Corporativo de las Empresas Públicas de la OCDE (2011), para evitar ineficiencias y distorsiones en el mercado y asegurar transparencia,  profesionalidad y calidad en su gestión. Esa revisión debiera haberse acometido con mayor celeridad que la aplicada en el área de las políticas sociales.

Julio Guiral Pelegrín, Presidente de la Asociación para la Defensa de la Función Pública Aragonesa”

viernes, 20 de septiembre de 2013

TRIBUTO A UN SERVIDOR PÚBLICO EXCEPCIONAL. EN MEMORIA DEL PROFESOR EDUARDO GARCÍA DE ENTERRÍA.



No resulta hiperbólico afirmar que García de Enterría ha sido un jurista determinante en la configuración de nuestro Estado, tanto en su condición de Estado de Derecho -presidido por la afirmación del principio de legalidad y el reconocimiento de los derechos fundamentales de los ciudadanos, garantizados por la supremacía normativa de la Constitución-, como en su vertiente de Estado Autonómico, siendo uno de los principales arquitectos del proceso de descentralización política operado a partir de nuestra norma constitucional.

Como ciudadanos y servidores públicos no podemos dejar de rendirle nuestro sencillo homenaje en este momento, pues la idea de Administración Pública por la que trabajamos es, en gran medida, la resultante de su extraordinario magisterio, al que numerosas generaciones de funcionarios públicos han accedido, de manera directa en las aulas de las Facultades de Derecho –donde su “Curso de Derecho Administrativo” constituía un texto de formación imprescindible- o de manera indirecta, al preparar las oposiciones de acceso a la función pública de cualquiera de las administraciones españolas, en cuyos temarios las tesis del profesor García de Enterría constituían la mejor guía posible.

Los ciudadanos debemos honrar a quienes han consagrado todas sus energías y capacidades a mejorar las condiciones de vida de los demás, ya sea desde la ciencia o desde el derecho o desde cualquier otra actividad. No debemos ignorar que el derecho persigue la protección de valores tan esenciales en nuestra vida individual y colectiva como son la libertad y la justicia. A ello se entregó de manera incansable y generosa el profesor Eduardo García de Enterría, y todos hemos podido disfrutar –consciente o inconscientemente- de su notable contribución a lo que de valioso tiene el ordenamiento jurídico de nuestro país.

La huella y el fermento del compromiso público y del pensamiento jurídico del profesor García de Enterría forman parte sustancial de la fortaleza de las instituciones públicas y de la sociedad española, y renovar y mantener vivo su magisterio constituye una tarea imprescindible para preservar y acrecentar todos los logros que contiene nuestro ordenamiento constitucional, entre los cuales ocupa una posición destacada la configuración de una Administración Pública al servicio del interés general, cuya realidad hemos de asegurar con nuestro trabajo todos los servidores públicos.

PUNTO MUERTO.



La función pública aragonesa, en su conjunto, debiera estar embarcada en un permanente proyecto de mejora y de adecuación a las demandas de los ciudadanos en la prestación de servicios públicos y en la tramitación de procedimientos administrativos, en los que quedasen adecuadamente aseguradas las garantías de los derechos de las personas interesadas. Pero no es esa tensión la que se percibe en los diferentes ámbitos de la Administración aragonesa. La maquinaria administrativa, por el contrario, parece hallarse en punto muerto, más allá de la gestión interna y rutinaria sin apenas valor añadido.

Domina la sensación de parálisis, de falta de rumbo, de ausencia de dirección y carencia de liderazgo. No hay proyecto político ni de gestión que resulten mínimamente reconocibles, a los que los funcionarios puedan aportar su conocimiento e impulso técnico, su compromiso profesional. No existe ilusión ni empeño en contribuir al buen funcionamiento del Estado de Derecho ni a la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos, sobre todo en momentos particularmente difíciles y comprometidos como los presentes, cuando más necesario resultaría.

No hay garantía alguna de que el Gobierno de Aragón actual tenga un compromiso inequívoco con el respeto de la legalidad y con el respaldo a la profesionalidad de quienes trabajan en la función pública autonómica. Sin confianza en los profesionales del sector público, cualquier acción de gobierno está llamada al fracaso y a la esterilidad, como estamos comprobando a la altura del ecuador de la presente legislatura.

La regeneración política y la cohesión social ante la crisis debieran ser los dos ejes esenciales de la actual acción de gobierno, pero no es posible detectar en los actuales responsables políticos ningún mensaje sólido en tales direcciones. Si el liderazgo político en la sociedad aragonesa es apenas perceptible, en el seno de la Administración autonómica es nulo, inexistente.

La falta de habilidades directivas y el sectarismo son dos elementos que lastran poderosamente la actuación de los responsables de la actual Administración aragonesa en ámbitos decisivos de la gestión pública, y restan credibilidad a cualquier mensaje de futuro que pretende transmitirse. 

Se impone una profunda reflexión sobre el actual marasmo que vive la administración autonómica, pues la escasez de recursos no puede servir de justificación a la parálisis existente, sino que justamente debiera ser razón para redoblar esfuerzos, coordinación, priorización de objetivos y, sobre todo, mostrar ejemplaridad y capacidad de movilización de recursos disponibles por parte de todos, pero muy en especial por los miembros del Gobierno de Aragón y altos cargos de la Administración autonómica.

jueves, 19 de septiembre de 2013

PRÁCTICAS AL DESCUBIERTO EN LAS EMPRESAS PÚBLICAS AUTONÓMICAS.



La red de empresas públicas de la que se ha dotado la Administración de la Comunidad Autónoma –en detrimento muchas veces del papel que corresponde a la función pública profesional- y las empresas concesionarias de servicios públicos autonómicos se han convertido, como estamos constatando con motivo de la investigación de la Fiscalía Anticorrupción en PLAZA, S.A., en un instrumento para eludir todos los mecanismos que aseguran la buena gestión pública y garantizan la concurrencia y la igualdad en el acceso al empleo público y a la adjudicación de contratos financiados con dinero público.

Las ventajas de agilidad y eficiencia que algunos Consejeros destacaban para justificar que la gestión de ciertos proyectos saliesen de la Administración departamental y se pusiese en manos de entidades empresariales, orientadas a los resultados evitando trabas burocráticas, se han revelado en gran parte falaces, pues el escaso clima ético de la organización era terreno abonado para la corrupción y el abuso. No bastaba con favorecer a familiares o amigos mediante subcontrataciones o encargos de trabajos, sino que algunos de éstos han resultado ficticios, mera apariencia para apropiarse del dinero público puesto a disposición de los responsables de las entidades empresariales.

Todos tenemos la sospecha fundada de que ciertas empresas públicas, ligadas a la gestión medioambiental, han sido un instrumento para el establecimiento de una amplia red de agentes políticos municipales y comarcales –con los que obtener presencia y poder local-, olvidando o relegando a un segundo plano todo objetivo de eficiencia o promoción del interés general. Pese a las evidentes sospechas, nada se ha hecho desde el Gobierno o desde las Cortes de Aragón para abordar la cuestión y sanear el sector público autonómico.

Esta Asociación va a colocar el sector público autonómico entre sus prioridades de análisis y seguimiento, y en breve formulará una serie de iniciativas para afrontar su hipertrofia y su deficiente gobierno corporativo, donde la presencia política –de gobierno y oposición- en sus consejos de administración cuestiona el propio modelo de eficiencia empresarial pretendido, situándose en las antípodas de las buenas prácticas propugnadas para las empresas públicas desde los organismos internacionales.

miércoles, 18 de septiembre de 2013

HACIENDO CAMINO AL ANDAR.



La reciente remisión al Departamento de Hacienda y Administración Pública del documento de aportaciones al Anteproyecto de Ley de Función Pública de Aragón no solo es resultado del esfuerzo de análisis y debate realizado por los miembros de esta Asociación a lo largo de los meses de julio y agosto –dedicando a ello, en algún caso, parte del tiempo de las vacaciones de verano-, sino que también es fruto del camino recorrido a lo largo de los siete años de existencia de esta Asociación, pues dicho documento no es un mero planteamiento teórico de lo que puede ser el modelo de función pública aragonesa en el marco de la Constitución y del Estatuto Básico del Empleado Público. También, en muchos temas, es el resultado de un largo camino de compromiso y defensa de la legalidad y de reivindicación de los principios constitucionales de la Administración Pública.

Nos satisface que esta Asociación pueda formular, dentro del proceso de elaboración de un proyecto de ley de función pública, un documento de alegaciones o aportaciones que, en numerosos aspectos –y, en particular, en materia de acceso a la función pública- viene precedido por años de esfuerzo para reclamar el cumplimiento de la legalidad y el respeto a los derechos de los ciudadanos, esfuerzo recompensado con importantes pronunciamientos del Tribunal Constitucional, del Tribunal Supremo y del Tribunal Superior de Justicia de Aragón.

Queremos creer en la capacidad que todos tenemos para reaccionar frente a las irregularidades que con frecuencia presenciamos en la actividad de las Administraciones Públicas, desde los valores que deben presidir nuestra actuación y trabajo como servidores públicos. Confiamos igualmente en que los planteamientos recogidos en las alegaciones realizadas, así como los formulados por otras personas o entidades, serán tomados en consideración por los responsables del Departamento de Hacienda y Administración Pública para mejorar el proyecto normativo elaborado.

Contribuir a la fortaleza y calidad del Estado de Derecho con nuestro trabajo diario y con la permanente reivindicación de sus principios básicos –como son el sometimiento del poder público a la legalidad y el respeto a los derechos fundamentales de los ciudadanos- puede ser nuestra principal tarea para asegurar el buen funcionamiento de nuestras instituciones públicas. Pero para ello es preciso un marco normativo que lo posibilite y lo garantice, y ello es responsabilidad primordial del Gobierno de Aragón, como impulsor del proyecto de ley de función pública, y de las Cortes de Aragón, a las que corresponde la aprobación final de dicha norma.

NO ES UNA OPINIÓN.



Cuando el pasado día 26 de agosto nos dirigimos a la Presidenta del Gobierno de Aragón para solicitar su intervención en garantía del derecho de petición ejercido por los ciudadanos –entre ellos, esta Asociación- ante los miembros del Gobierno de Aragón o los altos cargos de la Administración de la Comunidad Autónoma, estábamos reclamando el respeto obligado a un derecho fundamental, y no trasladando una opinión como parecen haber entendido –o quieren hacernos creer- en la Presidencia del Gobierno de Aragón.

No es inocente ni tampoco nueva la pretensión de calificar de opiniones los planteamientos de esta Asociación en relación con el respeto del ordenamiento jurídico. Cuando se compareció ante la Comisión de Peticiones de las Cortes de Aragón, al poco tiempo de constituirse esta Asociación, para reclamar el respeto a la legalidad de función pública y señalar el incumplimiento en materia de oferta de empleo público, el portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en aquella Comisión, Ricardo Berdié, calificó nuestras afirmaciones sobre incumplimientos de la Ley de Ordenación de la Función Pública de simples opiniones, pues la ilegalidad requiere sentencias que la declaren. “Mientras no haya sentencias, sus declaraciones son meras opiniones”, vino a decirnos. Las sentencias vendrían luego, confirmando nuestras palabras. Esa práctica de no prestar atención ni conceder credibilidad a quienes señalan los incumplimientos de las normas, y esperar a que la ilegalidad sea declarada por los jueces, ha sido determinante para alcanzar el actual deterioro del funcionamiento institucional. Lo venía a decir hace poco el Fiscal General del Estado: es precisa más prevención y no fiarlo todo a la acción de la Justicia.


El planteamiento de diferenciar opiniones y sentencias, si fuera sincero, podría resultar aceptable. Lo malo es que quien lo esgrime sabe en muchas ocasiones que la ilegalidad señalada resulta manifiesta, aunque no la haya declarado ningún juez. Si alguien presencia que un conductor se salta un semáforo en rojo y lo denuncia, no estamos ante una opinión sino ante la declaración del testigo de una infracción cometida, aunque ésta pueda no sancionarse nunca. De acuerdo con ello, el crimen perfecto, imposible de descubrir y probar, dejaría de ser un crimen para pasar a ser una mera opinión. Muchos políticos se han convencido de que las ilegalidades reiteradas y no sancionadas resultaban lícitas, y la cultura de la impunidad resultante nos ha llevado a la actual situación de corrupción generalizada. Hay que modificar la actual situación, desde el convencimiento del valor insustituible de las instituciones y desde la confianza en el vigor ético de la sociedad española.

Cuando esta Asociación reclama de la Presidenta el respeto al ejercicio del derecho de petición ante los miembros del Gobierno de Aragón –y, en concreto, ante el Consejero de Hacienda y Administración Pública- no está opinando sobre la función de dicho derecho o sobre la necesidad de su regulación, sino que está recordando al Gobierno de Aragón, a través de su Presidenta, algo tan obvio como es la obligación de respetar los derechos fundamentales que reconoce la Constitución, entre los cuales figura el derecho de petición (artículo 29 CE), cuyo ejercicio se regula por la Ley Orgánica 4/2001, de 12 de noviembre. Constitución y Ley Orgánica establecen con absoluta claridad cuáles son las obligaciones a las que quedan sujetas las autoridades públicas a las que los ciudadanos dirigen sus peticiones, y su cumplimiento no requiere de nuevos desarrollos normativos ni, mucho menos, cabe diferirlo a una futura Ley de Transparencia, que nada aporta en esta materia.

El que haya que recordar la necesidad de respeto de los derechos fundamentales a un Gobierno, tras más de treinta y cinco años de vigencia de la Constitución, es un dato suficientemente elocuente sobre la baja calidad democrática de nuestras instituciones, y contestaciones como la ofrecida desde la Secretaría General Técnica de la Presidencia solo vienen a ratificarlo. Por ello, esta Asociación se siente obligada a replicar de forma respetuosa pero firme a la contestación recibida, y así lo hará en próximos días.

Se reproduce a continuación el texto íntegro de la contestación remitida desde la Secretaría General Técnica de la Presidencia:

“Zaragoza, 9 de septiembre de 2013.

Estimado Sr. Guiral:

Por medio de la presente, se acusa recibo de su escrito de fecha 26 de agosto de 2013, donde manifiesta su opinión en relación al ejercicio del derecho de petición derivado de la Ley Orgánica 4/2001, de 12 de noviembre.

La transparencia y participación de los ciudadanos en los asuntos públicos es uno de los objetivos que tiene establecidos este Gobierno. Para ello se están adoptando diversas medidas como la publicación en el BOA de todos los convenios que firma el Gobierno de Aragón o el Canal “Transparencia”, con el que, a través del portal de servicios, se pretende que los ciudadanos sean partícipes de las decisiones que les conciernen.

Estas y otras medidas tendrán su reflejo en la futura ley de transparencia que está en proceso de elaboración en el momento actual.

Sin otro particular, reciba un cordial saludo.

Cristina Moreno Casado, Secretaria General Técnica de la Presidencia”.

martes, 17 de septiembre de 2013

LA ASOCIACIÓN REMITE HOY AL DEPARTAMENTO DE HACIENDA Y ADMINISTRACIÓN PÚBLICA SUS OBSERVACIONES AL ANTEPROYECTO DE LEY DE FUNCIÓN PÚBLICA.



Dando respuesta a la expresa invitación que realizó a finales del mes de junio el Consejero de Hacienda y Administración Pública, José Luis Saz, a esta Asociación para que realizase sus posibles consideraciones sobre el contenido del Anteproyecto de Ley de Función Pública de Aragón, elaborado por la Dirección General de la Función Pública y Calidad de los Servicios, hoy se remitirá a dicho Departamento el documento de aportaciones al citado Anteproyecto, que fue elaborado a lo largo de un conjunto de reuniones monográficas de estudio por parte de los miembros de esta Asociación, durante los meses de julio y agosto, y aprobado finalmente por la Junta Directiva de la Asociación celebrada el pasado día 10 de septiembre.

La opinión de esta Asociación sobre las líneas del proyecto normativo es claramente desfavorable, considerando necesaria una profunda revisión del mismo, pues además de no perfilar de manera suficiente un modelo de función pública reconocible para la Administración de la Comunidad Autónoma, sus contenidos en materia de provisión de puestos y carrera administrativa o de personal directivo no garantizan en modo alguno los necesarios avances hacia una función pública profesionalizada que contribuya a la regeneración de la acción pública en la Comunidad Autónoma.

El contenido del documento ha sido objeto de publicación en este blog, epígrafe a epígrafe, si bien es cierto que en torno al mismo no se ha producido el debate deseable por parte del conjunto de los miembros de la Asociación o por los seguidores de este blog –es posible que el escepticismo generalizado nos lleve a desentendernos del propio futuro de nuestra actividad profesional, lo que resulta altamente preocupante-, y desearíamos que la Dirección General de la Función Pública y Calidad de los Servicios diese igualmente a conocer el conjunto de las aportaciones recibidas, haciendo público su contenido, y la decisión motivada sobre su aceptación o rechazo, para que así cobre verdadero sentido el trámite de participación que se ha arbitrado.

Se reproduce, a continuación, el texto íntegro del escrito de remisión del documento de aportaciones al Departamento de Hacienda y Administración Pública:

“Excmo. Sr. Consejero de Hacienda y Administración Pública
Pza. de los Sitios, 7
50071-ZARAGOZA

Zaragoza, 16 de septiembre de 2013.

Estimado señor:

Atendiendo a su invitación del pasado mes de junio, en la que se solicitaba la opinión de esta Asociación sobre el texto del Anteproyecto de Ley de Función Pública de Aragón, elaborado por la Dirección General de la Función Pública y Calidad de los Servicios, le remitimos el documento de aportaciones elaborado por los miembros de esta Asociación, resultante de las diferentes sesiones de trabajo mantenidas a lo largo de los meses de julio y agosto.

Consideramos, como puede deducirse de la lectura del documento, que deberían revisarse importantes elementos del Anteproyecto para asegurar una función pública profesional, y en cualquier caso, dada la enorme relevancia del proyecto normativo para establecer una adecuada ordenación de la función pública de la Administración de la Comunidad Autónoma y de las entidades locales aragonesas, creemos que ese Departamento debiera recabar el dictamen del Consejo Consultivo de Aragón sobre el texto finalmente resultante.

Igualmente, y para asegurar la transparencia del desarrollo y resultados de este trámite de consultas respecto al texto del Anteproyecto, creemos deseable que se dé conocimiento de las personas o entidades que han formulado aportaciones al texto, así como del contenido de las mismas y de su aceptación o rechazo motivado por parte de la Dirección General de la Función Pública y Calidad de los Servicios.

Agradeciendo en cualquier caso la expresa invitación realizada a esta Asociación para expresar su opinión, reciba una atento saludo.


Julio Guiral Pelegrín. Presidente de la Asociación para la Defensa de la Función Pública Aragonesa”