Esta
Asociación, en la recta final de la anterior legislatura, tuvo una reunión de
trabajo con la entonces Presidenta del Partido Popular, Luisa Fernanda Rudi, a
petición suya, dado el interés mostrado por conocer nuestras opiniones sobre la
situación en que se hallaba la función pública aragonesa. En aquella reunión le
expresamos, entre otras muchas cuestiones, nuestra preocupación por los
incumplimientos en materia de oferta de empleo público, y le informamos de los
recursos judiciales promovidos para exigir la convocatoria de todas las plazas
vacantes ocupadas por funcionarios interinos, como exige el Estatuto Básico del
Empleado Público y la Ley
de Ordenación de la Función Pública
de la Comunidad Autónoma
de Aragón.
La
máxima responsable del Partido Popular en Aragón y candidata a la Presidencia del
Gobierno de Aragón, flanqueada por Rosa Plantagenet y Modesto Lobón, escuchó con
atención todas las posiciones de la Asociación y tomó abundantes notas de lo que se
dijo en la reunión mantenida.
No
obstante, y ahora que se aproxima ya el final de la actual legislatura, durante
la cual Luisa Fernanda Rudi ha ocupado la Presidencia del
Gobierno de Aragón, el balance de la gestión en materia de función pública
resulta manifiestamente decepcionante. No solo por la falta de objetivos serios
en cuanto a su profesionalización, sino sobre todo por el olvido reiterado de
la legalidad. Quienes se nos presentaron como pretendidos restauradores de la
legalidad, se han revelado como gestores carentes de respeto a las normas, y
así ha quedado claramente de manifiesto en materia de oferta de empleo público.
A
lo largo de esta legislatura, el Gobierno de Aragón no ha aprobado oferta de
empleo público para administración general ni en 2012 ni en 2013 ni en 2014. El
incumplimiento en la materia ha sido absoluto, sin que pueda justificarse tal
situación por las previsiones de las Leyes de Presupuestos Generales del
Estado, pues las mismas no han impedido que cada año se aprobase la
correspondiente Oferta de Empleo Público en la Administración
General del Estado. Tampoco pueden computarse como ofertas
aprobadas en estos años la ejecución forzosa –pues el Gobierno se resistió a su
cumplimiento- de las sentencias judiciales que anularon las ofertas de 2007 y
2011, cuya ejecución ha obligado a la realización de procesos selectivos que,
de otra manera, no se hubieran producido.
Cumplir
forzosamente sentencias judiciales no es respetar las leyes, sino justamente lo
contrario: las sentencias son una sanción por el incumplimiento. Debe además
aclararse que ni siquiera las decisiones del Gobierno de Aragón han sido
respetuosas con los términos de las sentencias –y así lo declaró el Tribunal
Superior de Justicia de Aragón, al obligar a aprobar nuevas ofertas
complementarias, por estimar insuficientes las acordadas por el Gobierno de
Aragón, tras tratar de ampararse indebidamente en un Decreto-ley que
denunciamos como radicalmente inconstitucional-, y está todavía pendiente de
valorar el fraude cometido por el Gobierno en relación con el personal docente
no universitario, al omitir en el proceso de ejecución los centenares de plazas
del Cuerpo de Maestros ocupadas por interinos que debieron haber sido incluidas
en la oferta anulada de 2011.
De
todo ello, a lo largo de la legislatura, hemos ido informando directamente a la Presidenta del Gobierno
de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, y por las respuestas recibidas podemos deducir
que la Presidenta
se ha limitado a dar traslado de nuestros escritos a los Departamentos
correspondientes, sin adoptar decisión alguna, sin efectuar indicación alguna
sobre el necesario respeto de las normas, sin asumir la responsabilidad que le
corresponde en la dirección y coordinación del propio Gobierno. Los
incumplimientos del Gobierno, en este caso, son una responsabilidad directa de
su Presidenta, ya que ha estado puntualmente informada de la situación, sin
tomar medida alguna que asegurase tanto el cumplimiento de las leyes como la
correcta ejecución de las sentencias.
También,
en relación con la necesaria aprobación de la Oferta de Empleo Público de 2014, nos dirigimos a
la Presidenta
del Gobierno de Aragón para reclamarle el cumplimiento de la legalidad y asegurar su aprobación, aunque fuera dentro de los límites establecidos por la Ley de Presupuestos Generales
del Estado, cuya técnica de tasas de reposición de efectivos tenemos impugnada actualmente
ante el Tribunal Supremo. Toda la respuesta recibida a dicha petición fue que
se había dado traslado al Departamento de Hacienda y Administración Pública,
por ser el competente en materia de función pública. El traslado de un escrito
no conlleva ni puede conllevar el traslado de la responsabilidad de la acción
del gobierno, y la aprobación de las disposiciones que competen al Gobierno son
una expresa responsabilidad de su Presidente, como se indica en la vigente Ley del Presidente y del
Gobierno de Aragón.
El
incumplimiento de las responsabilidades legales atribuidas y la inhibición en
su ejercicio no es un comportamiento que pueda aceptarse en ningún responsable
político, especialmente si ello conlleva una directa lesión en los derechos
fundamentales de los ciudadanos, como es el presente caso.
Por
ello, esta Asociación ha denunciado ante
el Tribunal Superior de Justicia de Aragón
la inactividad normativa en la que ha incurrido el Gobierno de Aragón, al no
aprobar oferta de empleo público en 2014 en el ámbito de administración general
de la Administración
autonómica., iniciativa que hemos puesto en conocimiento de su Presidenta y máxima
responsable.
Se
reproduce a continuación el contenido íntegro del escrito dirigido a la Presidenta del Gobierno
de Aragón:
“Excma.
Sra. Presidenta
Gobierno de
Aragón
Edificio
Pignatelli
Paseo de María
Agustín, 36
50071-ZARAGOZA
Zaragoza,
26 de febrero de 2015.
Estimada
señora:
En
mi condición de Presidente de la
Asociación para la
Defensa de la Función
Pública Aragonesa, entidad comprometida con la promoción de
la legalidad, la profesionalidad y la ética pública en el ámbito de las
diferentes administraciones, deseo informarle del reciente recurso
contencioso-administrativo promovido por nuestra Asociación ante el Tribunal Superior
de Justicia de Aragón frente a la inactividad del Gobierno de Aragón, por no
aprobar el Decreto correspondiente a la Oferta de empleo público para 2014 en el ámbito
de la administración general de la Administración de la Comunidad Autónoma
de Aragón.
Tal
aprobación fue expresamente requerida al Consejero de Hacienda y Administración
Pública, Javier Campoy, mediante escrito de 8 de noviembre de 2014, sin que el
mismo haya obtenido respuesta alguna.
Pese
al citado requerimiento, y una vez concluido el ejercicio 2014, queda patente
que el Gobierno de Aragón no ha aprobado oferta de empleo correspondiente al
ámbito de administración general, ya que, en lugar de aprobar una oferta única
de empleo para 2014, se ha optado por aprobar ofertas sectoriales independientes
para personal docente no universitario y personal estatutario del Servicio
Aragonés de Salud, a través de los Decretos 217 y 218/2014, ambos de 16 de
diciembre.
Con
la inactividad normativa señalada, el Gobierno de Aragón viene a reincidir en el incumplimiento del
deber legal de aprobación de oferta anual de empleo público –como ya ocurrió en
2012 y 2013- y se evidencia la resistencia reiterada a asegurar la realización
de un derecho fundamental de los ciudadanos –vinculante para todos los poderes
públicos- y la clara voluntad de inaplicación del régimen de selección de
personal que se establece tanto en el Estatuto Básico del Empleado Público como
en la Ley de
Ordenación de la Función Pública
de la Comunidad Autónoma
de Aragón.
No
aprobar las disposiciones que exigen las Leyes, cuando las mismas resultan
necesarias para el ejercicio de los derechos de los ciudadanos, es un claro
supuesto de vulneración del ordenamiento jurídico, y por ello esta Asociación
ha reaccionado frente a tal incumplimiento, promoviendo ante el Tribunal
Superior de Justicia de Aragón el correspondiente recurso judicial, utilizando
el procedimiento especial de protección de los derechos fundamentales, al
afectar el citado incumplimiento de manera directa al ejercicio del derecho
fundamental de acceso a la función pública, reconocido a todos los ciudadanos
en el artículo 23.2 de la Constitución
Española.
La
reivindicación y defensa del Estado de Derecho, asumida por esta Asociación en
el ámbito de la función pública, pasa necesariamente por reclamar el control
judicial frente a actuaciones del Gobierno de Aragón que desprecian la
legalidad de función pública e ignoran derechos fundamentales de los
ciudadanos, como sucede en el presente caso, incurriendo con ello en la inaplicación
de preceptos constitucionales que en modo alguno pueden desconocer los poderes
públicos.
Creemos
que, sin perjuicio del control jurisdiccional de la inactividad normativa del
Gobierno de Aragón, corresponde al máximo responsable de dicho órgano velar
para que todos sus miembros se atengan de manera estricta a aquellas normas
cuyo fin es asegurar el pleno ejercicio de los derechos fundamentales de los
ciudadanos, aplicando en caso contrario las consecuencias previstas por la Ley 19/2013, de 9 de diciembre,
de transparencia, acceso a la función pública y buen gobierno, en cuyo artículo
29 se tipifica como infracción muy grave el incumplimiento del deber de respeto
a la Constitución,
supuesto en el que ha de entenderse incursa toda actuación que suponga una
directa vulneración de los derechos fundamentales reconocidos en la norma
constitucional, como es el caso del derecho de acceso a la función pública.
Ningún
poder público puede desconocer la obligación de preservar los derechos
constitucionales de los ciudadanos, exigencia que vienen desatendiendo sin
embargo tanto el Consejero de Hacienda y Administración Pública como el propio
Gobierno de Aragón en su conjunto, lo que nos obliga a apelar una vez más a los
órganos jurisdiccionales para que amparen el derecho vulnerado.
Agradeciéndole
de antemano su atención, reciba un respetuoso saludo.
Julio Guiral Pelegrín. Presidente de la Asociación para la Defensa de la Función Pública Aragonesa”
2 comentarios:
No hay peor sordo que el no quiere oir.
No hay nada estable, nada es seguro, tras la convulsión tectónica que sacude la política española. Las réplicas y contrarréplicas se suceden. Ahí, en el espacio de centro, residen los tres o cuatro millones de votos que hacen que la balanza de la mayoría electoral se incline hacia el PP o hacia el PSOE.
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