Las
elecciones al Parlamento Europeo celebradas ayer, más allá del valor que supone
todo proceso de participación democrática, deja en evidencia los graves
problemas que aquejan a la Unión Europea
y a una gran parte de los Estados que la integran. La escasa participación de
los ciudadanos parece mostrar un desinterés por lo que hoy representa Europa
como proyecto de integración política y económica –a pesar de la intensidad del
debate producido a lo largo de la crisis económica que padecemos desde 2008- y
el voto mayoritario a opciones eurófobas en algunos países –cuyos ejemplos máximos
se producen en Francia y Gran Bretaña- son signos evidentes del riesgo político
que acecha al futuro del proyecto europeo y a los valores democráticos que proclaman
los Tratados de la Unión Europea.
El
voto de las elecciones europeas no solo pone de manifiesto la crisis del espíritu
europeísta en los diferentes países que conforman la Unión, algo que obliga a una
seria reflexión sobre el riesgo de repliegue nacional de gran parte de la
ciudadanía europea, sino que también saca a la luz los problemas que afrontan
los sistemas democráticos de los diferentes Estados, donde la corrupción, la
creciente desigualdad social y la crisis de confianza institucional, entre otros
elementos, han minado la credibilidad de gran parte de los responsables políticos
que vienen ocupando el centro de la escena pública.
Insistimos
en la importancia que el respeto al Estado de Derecho representa para conservar
la identidad constitucional de las sociedades europeas, un modelo que tiene en
el respeto a los derechos fundamentales y en el mantenimiento de la cohesión
social sus dos elementos fundamentales. Los contextos complejos –las circunstancias
adversas- no deben llevar a rectificar convicciones firmes y valores sólidos,
que han demostrado su primacía ética a lo largo de la historia de la humanidad.
Son precisamente dichas convicciones y valores los que permiten orientarse en
momentos de confusión como los que hoy vive Europa. No hay resultado electoral
de ninguna fuerza política española que, en estos momentos, pueda compensar el
desastre que para el conjunto de Europa representan los incomprensibles avances
de los movimientos antieuropeos en países centrales de la Unión.
La
solidez del proyecto europeo, indispensable para la solidez de cada uno de los
países de la Unión,
es un compromiso de todos los ciudadanos europeos. Esa premisa parece olvidarse
a la vista de la baja participación en las elecciones europeas, permitiendo con
ello que las fuerzas políticas antieuropeas obtengan una representatividad muy
superior a la que les corresponde. El daño no solo lo sufre la Unión Europea –al alojar en sus
instituciones a sus enemigos declarados-, pues estas elecciones han
ensombrecido el futuro democrático de importantes países, como Francia, cuya
situación no puede dejar de alarmarnos como ciudadanos europeos y como demócratas.
27 comentarios:
Los dos grandes partidos españoles, que han gobernado el país ininterrumpidamente desde 1977 —el PP reivindica la herencia de UCD— obtuvieron anoche el peor resultado de la historia democrática. Se quedaron ligerísimamente por debajo del 50%, la cifra simbólica. Perdieron más de cinco millones de votos y 30 puntos sobre las europeas de 2009, cuando lograron el 80% de los votos.
La situación no es similar a la de otros países europeos donde ha habido vuelco total, porque el tercero en discordia, IU, quedó muy lejos del segundo, el PSOE. Pero el golpe al bipartidismo es mucho mayor de lo esperado por las grandes formaciones y augurado por todas las encuestas. Ninguna les daba por debajo del 65%. Y la entrada de Podemos, la gran revelación de las elecciones con cinco escaños, cuarta fuerza política solo uno por debajo de Izquierda Unida, parece también un mensaje contra los grandes, ya que es una formación nueva surgida alrededor de un personaje conocido de la televisión como Pablo Iglesias, que viene de Izquierda Unida y ha triunfado con su propia formación y ha estado a punto de superar a la coalición de Cayo Lara.
EL PAIS.
El desplome del bipartidismo, la irrupción de Podemos, la crisis del PSOE y la victoria pírrica del PP desplazaron anoche la atención de un asunto que sí ocupó muchos comentarios en las horas previas y que tiene muy preocupada a toda la clase política y al mundo de las grandes empresas: el resultado en Cataluña. La gran subida de participación en esta comunidad, que en 2009 había votado ocho puntos menos que la media, auguraba lo que sucedió al final: una movilización masiva del soberanismo para lanzar una señal a favor del proceso. Esta fortaleza, sumado al ascenso de Ciudadanos —aunque no llegó a superar al PP— ha dejado muy tocados a los socialistas y a los populares en esta comunidad, lo que deja con escaso peso político en Cataluña a los referentes de los dos grandes partidos nacionales.
ep.
Populares y socialistas se quedaban con otro dato positivo: la participación no se hundió, como se temía, y aguantó en cifras muy similares a la de 2009. Y a pesar de la fragmentación del voto, ningún partido euroescéptico y mucho menos xenófobo ha logrado un resultado importante, al contrario que en otros grandes países europeos.
Européennes : les 5 enseignements de l'élection.
LE MONDE
1. Une indubitable victoire du FN avec une abstention moindre
En passant de 6,34 % à plus de 25 % entre 2009 et et 2014, avec une abstention assez similaire entre les deux scrutin (56,9 %, contre 59,37 % il y a cinq ans), le Front national réalise sans conteste un score record. Il est, pour la première fois de son histoire vieille de 30 ans, en tête d'une élection nationale, loin devant l'UMP. Il faut additionner, comme l'ont fait certains caciques du parti de Jean-François Copé, ses scores et ceux de l'UDI, pour qu'elle repasse artificiellement devant le Front national.
Marine Le Pen et son père, qui font partie des eurodéputés les moins assidus au Parlement européen, devraient amener à Bruxelles une vingtaine de nouveaux europarlementaires FN. Ils sont en outre en position de force pour tenter de monter une coalition eurosceptique au Parlement.
Le PS subit un revers cinglant, en ne remportant que 14,3 % des suffrages, contre 16,8 % en 2009. Le parti de la majorité arrive, en outre, en troisième position, loin derrière le Front national et l'UMP. Le PS perd ainsi un siège au Parlement européen, et n'y dispose plus maintenant que de 13 députés. Après l'échec des municipales, cette défaite européenne est d'autant plus alarmante pour les socialistes.
Lors d'une allocution télévisée, le premier ministre Manuel Valls a évoqué un « choc », un « séisme ». Un champ lexical qui ressemble à celui employé après le 21 avril 2002, lorsque le FN s'était qualifié pour le second tour de la présidentielle.
L'Elysée a convoqué une réunion dès lundi matin avec le premier ministre et plusieurs membres du gouvernement, estimant que « des leçons doivent être tirées » de ce scrutin.
3. A l'UMP, l'horizon s'assombrit pour Jean François Copé
La droite espérait encore terminer devant le FN. C'est raté, et c'est une mauvaise nouvelle pour Jean-François Copé. Englué dans l'affaire Bygmalion, de plus en plus contesté en interne, le président du parti sait qu'il aura les plus grandes difficultés à faire taire ses opposants internes, qui donnent de la voix, voire n'hésitent plus à réclamer son départ de la tête du parti. Un bureau national est prévu mardi matin 27 mai.
4. Poussée des conservateurs et eurosceptiques en Europe
La France n'est pas la seule à connaître une poussée de l'extrême droite : Le Danemark, le Royaume-Uni, l'Autriche ont donné plus de 15% des voix à des partis proches du FN. Selon les premières estimations, les eurosceptiques auraient jusqu'à 39 sièges antifédéralistes et 33 sièges souverainistes.
5. Le PPE en tête au Parlement
Selon les estimations diffusées par Bruxelles, les conservateurs du Parti populaire européens (PPE) arrivent en tête avec 212 sièges, suivis par les socialistes et démocrates (S&D ; 185 sièges). Les centristes (ADLE) disposeraient, eux, de 71 sièges ; les Verts de 55 sièges et la gauche radicale de 45 députés. Le groupe ECR, où siègent les conservateurs britanniques, obtient 40 élus, contre 36 au groupe EFD, où siègent les eurodéputés du parti UKIP.
Comentario:
Les racistes jubilent. J'ai honte pour mon pays.
Lo sucedido en Francia asusta.
El PP ha ganado las elecciones en Aragón pero se ha dejado en el camino desde los anteriores comicios europeos unos 68.000 sufragios, aunque la pérdida de votos del PSOE, en segunda posición, es de casi 95.000, mientras que Podemos se erige en tercera fuerza en Aragón con el 9,5 % de los votos.
Podemos, la formación liderada por Pablo Iglesias, ha conseguido cinco diputados en el Parlamento Europeo y, por tanto, el aragonés Pablo Echenique ocupará un escaño, algo que también han conseguido otras dos aragonesas Verónica Lope, que ocupa la décima posición en la lista popular, e Inés Ayala, la décimo tercera en la candidatura socialista.
HA.
El líder del PSOE en Aragón, Javier Lambán, ha reconocido que los socialistas tienen que hacer ahora autocrítica para saber por qué han obtenido nueve eurodiputados menos que en 2009 y ha emplazado al partido a mantenerse unido y cohesionado para sobreponerse ante próximos compromisos electorales.
HA.
Pablo Echenique, de Podemos, ha apuntado que el apoyo que finalmente han conseguido "se veía en la calle y en las redes" y demuestra que hay "una gran masa social" que les apoya y que entiende que los representantes "actuales no gobiernan para el ciudadano sino para una élite económica muy pequeña"
HA.
Para el candidato de IU Paco Iturbe, los resultados obtenidos por La Izquierda Plural son "el inicio de un nuevo ciclo" y "un paso más hacia un futuro donde el gran derrotado es el bipartidismo", mientras que el coordinador de UPyD en Aragón, Carlos Aparicio, ha considerado que aunque no han tenido "una gran explosión", pasar de un diputado a cuatro ha sido un "salto cualitativo importante".
Finalmente, Ángela Labordeta, de CHA, ha considerado que incrementar en 20.000 el número de votos es "un triunfo".
HA.
Los peores presagios se han cumplido y los dos grandes partidos han tocado suelo en Aragón. El batacazo de PP y PSOE ha sido de tal calibre que ha convertido a Podemos en la tercera fuerza de la comunidad y permitirá que Pablo Echenique (su candidato por Aragón) ocupe escaño en el Parlamento Europeo.
El vigor con el que ha irrumpido en las urnas la formación que lidera Pablo Iglesias ha relegado a Chunta (Primavera Europea) al sexto lugar, por detrás de Izquierda Unida (La Izquierda Plural) y UPD, que han triplicado los apoyos de las últimas europeas.
Si bien es cierto que el Partido Popular ha sido el ganador de los comicios en Aragón, con un 27,85% de los sufragios, se ha quedado muy lejos del 41,8% de los apoyos que obtuvo de los aragoneses en 2009. Pese a todo, en la sede popular consideraban anoche que se han salvado los muebles. Una situación muy parecida a la que ha vivido el PSOE, que con un 20,6% de los respaldos, ha registrado uno de los peores datos, si no el peor, de la democracia. No había más que ver ayer el ambiente que reinaba en el cuartel general de los socialistas aragoneses.
Si estos datos se extrapolaran a unas elecciones autonómicas (aunque la ausencia del PAR en estos comicios puede distorsionar un poco el resultado), el panorama sería muy claro: adiós al bipartidismo, una derecha en franco retroceso y una izquierda fragmentada, condenada a entenderse para gobernar.
Hay que tener en cuenta que considerando a UPD como partido de centroizquierda, esta formación más el resto de la izquierda (IU, Podemos y CHA) superan el 30% de los votos, muchos más que PSOE y PP por separado, en lo que representa un claro giro hacia la izquierda de los votantes aragoneses. Y se evidencia también un voto de desencanto por las políticas del PP en Aragón, liderado por Luisa Fernanda Rudi, y un castigo a los socialistas que desde su salida del Gobierno regional no han sido capaces de conectar con fuerza con los electores de la comunidad.
nicolás espada
El fenómeno Podemos se dejó sentir ayer en la mayoría de las comarcas de Zaragoza, aunque quizá no de forma tan fuerte como en la capital de la provincia. En las cabeceras de comarca tan solo en Caspe, Zuera y Daroca se colocó como tercera fuerza, mientras que en el resto su porcentaje de votos fue menor y siempre por debajo de partidos más tradicionales como IU, CHA (Primavera Europea) e incluso un ya asentado UPD. Aún así, su presencia ha sido destacada en todas las cabeceras y en casi todas las localidades.
EPA.
Los resultados de las elecciones celebradas en los 28 países de la Unión Europea han supuesto una importante sacudida tanto en el ámbito continental --una cuestión clave, aunque relegada en la campaña española-- como en lo que afecta a nuestra realidad más inmediata. Las elecciones han confirmado en España que el bipartidismo imperfecto que rige desde la transición da muestras de agotamiento. PP y PSOE solo suman el 49% de los votos, lo que augura complicaciones a la hora de futuras alianzas de gobierno. En cualquier caso, la contundente irrupción de Podemos, que en Aragón se alza como la tercera fuerza más votada --a la izquierda de IU-- y aportando el eurodiputado Pablo Echenique, indica que es el PSOE el que más dificultades tiene para cuidar su flanco. Mariano Rajoy, por su parte, ha salvado los muebles y de paso ha dejado en una delicada situación a Alfredo Pérez Rubalcaba. Pese al retroceso de 16 puntos en relación con las elecciones de hace cinco años, el PP ha logrado una ligera diferencia sobre el PSOE. Con estos resultados, Rajoy tiene margen para mantener su política de austeridad y confiar en que la recuperación que pregona se haga más visible al final de la legislatura. Al PSOE por su parte, se le aceleran los tiempos. No ha logrado que se olvide su gestión en la primera parte de la crisis, primero negándola y más tarde poniendo en marcha las políticas de austeridad. El socialismo español necesita cambiar caras y proyecto en las primarias de noviembre. Otra clave que no se puede obviar es que por primera vez desde el restablecimiento de la democracia, un partido que no sea CiU o el PSC ha ganado las elecciones en Cataluña. Esquerra ha consumado una victoria que tendrá su peso en el soberanismo.
El mapa europeo se mantiene más estable, pero no exento de complicaciones. Se han confirmado los presagios del auge de los partidos antieuropeos y ultras, que logran el 25% de la Cámara de Estrasburgo. Un reflejo, junto con la abstención, del desapego de la ciudadanía hacia las instituciones comunitarias. Un auténtico sálvese quien pueda. Los resultados globales indican que el nuevo Gobierno de la UE se apoyará en una alianza entre conservadores y socialdemócratas. La importante caída del PPE no impide que Jean-Claude Juncker aspire a presidir la UE. Ahora no sería de recibo que Angela Merkel moviera los hilos para buscar un candidato más a su medida.
EPA.
¿Pero cómo no van a emerger fuerzas políticas nuevas y “populares” para defenderse de tanta connivencia con la corrupción y tanta prepotencia?. De alguna manera se tiene que hacer oir el descontento y la indignación de la gente… solo hace falta tener un poco de sensibilidad, escuchar a la calle con atención y no estar embelesado con los propios egoísmos para poder entender lo que está pasando… y lo que va a pasar… Cuando sientes que nadie ni nada te defiende, que no hay liderazgos (ni buenos, ni malos), que las instituciones no funcionan y que todo es una maquinaria al servicio de intereses de poder… pues pasa lo que está pasando y lo que puede pasar (véase Francia). Por cierto, lo de Francia… yo creo que habría que escribir una carta al Justicia de Aragón o mejor, a la Consejera de Educación y al Consejero de Hacienda, exigiendo responsabilidades… (ustedes ya me entienden). Seguimos confiando…y esperando. Gracias
Por primera vez desde que se restauró la democracia, he declinado acudir a votar. Así me he sumado a la mayoría del censo que ha optado por abstenerse, superando con creces a quienes decidieron apoyar alguna candidatura pese a creer que no lo merecían, a juzgar por los barómetros del CIS que revelan una abrumadora desafección política. Por supuesto, el agregado abstencionista es muy heterogéneo, pudiendo distinguirse diversas categorías como la abstención apolítica, que no se siente concernida por los comicios; la acomodaticia, que no se acerca a las urnas porque el coste de hacerlo no compensa su ínfima contribución al resultado final; o la indignada, que se niega a votar para no sentirse cómplice de una clase política tan vergonzosa como corrupta. Pero en realidad mi no-voto se aproxima más bien a la abstención indiferente: aquella que rehúsa participar en una elección ficticia cuyas alternativas son incapaces de alterar la realidad.
Cualquiera que fuese la candidatura vencedora, nada podía cambiar en Europa ni en España. De ahí mi indiferencia respecto a uno u otro competidor cuya victoria resultaría necesariamente pírrica. Respecto a la Unión, es verdad que simpatizo con la socialdemocracia, pero sé que siempre se plegará a las directrices de Fráncfort favoreciendo los intereses de la élite financiera internacional. Por eso importa poco quién sea el nuevo presidente de la Comisión, pues las decisiones últimas las seguirán tomando la cancillería alemana y el BCE dirigido desde el Bundesbank. Votarles como mal menor, aceptando con credulidad el cuento del pastorcito y el lobo ultranacionalista, me parece una ingenuidad. Y una victoria de Syriza tampoco fortalecería al Parlamento europeo, que sería puesto en seguida en cuarentena.
En cuanto a España, mi indiferencia entre ambos miembros del duopolio es total, pues cualquiera que hubiera ganado, nada cambiaría por eso. Es verdad que en público se despellejan con rencor en un agrio ajuste de cuentas, pero en privado no dudan en entenderse. Como hicieron en agosto de 2011, cuando pactaron la modificación exprés de la Constitución para introducir la regla de oro del ajuste fiscal que nos impuso el directorio europeo. O como harán respecto a la Corona y a Cataluña en cuanto se les presente la oportunidad.
Y es verdad también que no son ideológicamente equiparables, pues en cuestiones de género, de salud o educación la distancia entre ellos resulta abismal. Pero ambos son responsables al alimón de imponer un brutal austericidio sobre las clases populares, y ambos se comportan con la misma opacidad culpable encubriendo sus flagrantes corruptelas. Lo cual podría haberme aconsejado votar alguna candidatura alternativa, pero el remedio sería peor que la enfermedad, pues si el bipartidismo retrocediese se impondría con certeza la gran coalición. De ahí la indiferencia entre la forma tácita o expresa del pacto a dos que nos gobierna en beneficio de las élites institucionales.
En fin, la última razón para ir a votar hubiera sido por puro civismo. Pero ¿por qué habríamos de cumplir nuestro deber cívico cuando nuestros representantes lo incumplen a nuestra costa con tanta impunidad? Es verdad que la caridad cristiana exige poner la otra mejilla, pero la paciencia y la dignidad políticas también tienen límites.
enrique gil calvo
Comentario:
coño, tu también. en las ultimas elecciones europeas me toco en una mesa. al final del día cuando expuse porque me abstenía, siendo evidente que no era por vaguería ya que tenía la urna delante de mi, toda la mesa decidió abstenerse también. toda menos la representante de PP. que casualidad.
“Debe acabarse con los políticos que están en el cargo desde 1979”
Carlos Jiménez Villarejo
Comentario:
¡Qué curioso que lo diga Villarejo, que tiene 79 años y siempre ha vivido de la administración! Y además, parece que va a renunciar a su escaño en Bruselas para que lo ocupe Tania Sánchez, la número 6 en la lista, procedente de Izquierda Unida y pareja de Pablo Iglesias...
Comentario:
Si Villarejo llegase a renunciar a su escaño (aunque él declara que no lo hará), sería comprensible, ya que tiene 79 años e iba en el nº 3 por decisión de sus electores. Aun así, los ciudadanos distinguimos muy bien entre un señor honorable de 79 años, en plena posesión de sus facultades mentales, diciendo verdades como puños, como en esta entrevista, y otro señor honorable, mermado por el alzheimer, al que, en la otra vida, para que se entere, le explicarán que estuvo en un mitin de ERC. La comparación sin duda que es odiosa. Porque lo de Maragall (Ernest), paseando a su hermano, va más allá de la corrupción. Consiste en que los políticos nos toman por tontos. Si Villarejo por fin no tomara posesión de su escaño, lo ocupará el siguiente de la lista, como es lógico, con la diferencia (puestos, una vez más, a hacer comparaciones odiosas) de que a Tania Sánchez la han puesto en ese lugar los electores y no Pablo Iglesias, mientras que a Ana Botella la ha puesto en las alturas políticas su marido, el señor Aznar.
Comentario:
Sugerencia para Podemos en las próximas elecciones nacionales: Suprimir el Senado. No sirve para nada más que para disponer de más poltronas para la casta. Suecia y Dinamarca suprimieron sus senados en el siglo XX. Y no se les cayó el mundo. Lo dicho, proponer suprimir el Senado y, en consecuencia, no presentar candidatos a senador. Sólo con esto arrasarían en las urnas.
Comentario:
No hago demagogia, el país podría funcionar exactamente igual si no existiera el congreso, los diputados son empleados a sueldo de los partidos políticos, no representan a los ciudadanos, lo único que hacen es apretar un botón, no tienen autonomía y dependen totalmente de las consignas de los jefes de sus grupos parlamentarios que se comportan como si fueran verdaderos comisarios políticos. Y lo mismo se puede decir del Senado. Creo que sus opiniones y las medidas que proponen, se guían por un conocimiento superficial del sistema político.
Comentario:
@romairales: "Los partidos de izquierda tienen pensado que cuando vuelvan a gobernar realizarán un examen obligatorio de enseñanza básica a todos los trabajadores y jubilados que votan al pp. Los que suspendan tendrán restringido el derecho a votar por insuficiencia mental." Perdone usted, pero los que siguen votando al PSOE también deberían suspender: no está muy bien meditado votar a un partido que no ha sido verdaderamente socialista NUNCA, con una oposición inepta y vergonzante, sin alternativas a los problemas acuciantes de España y que no le va a la zaga al PP en corrupción. ¿O EREs de los que no se quiere enterar de los hechos y miras para otro lado?
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