lunes, 27 de junio de 2011

EL SENADO TRAMITA UNA PETICIÓN DE LA ASOCIACIÓN.

Al igual que hizo hace escasos días la Comisión de Peticiones del Congreso de los Diputados, ahora es la Comisión de Peticiones del Senado la que, según lo acordado en su sesión del pasado día 13 de junio, ha decidido dar trámite a la petición remitida por esta Asociación en relación con el respeto al derecho de acceso de los ciudadanos a la función pública y la consiguiente aprobación de las Ofertas anuales de Empleo Público por las diferentes Administraciones Públicas con los criterios que estableció recientemente la sentencia del Tribunal Supremo que anuló la Oferta de Empleo Público de 2007 aprobada por el Gobierno de Aragón, entre los cuales destaca la obligada inclusión de las plazas vacantes ocupadas por funcionarios interinos.

De acuerdo con la comunicación que remite a la Asociación el Presidente de la Comisión de Peticiones del Senado, dicha Comisión ha acordado dar traslado de la petición realizada al Ministerio de Política Territorial y Administración Pública, al ser el competente en materia de función pública. Aunque pueda parecer una medida de escasa entidad, como es la simple remisión de una petición a un Ministerio, no es posible ignorar que en las relaciones que guardan las Cortes Generales con el Gobierno de la Nación está siempre presente la idea de control y de impulso de la acción de gobierno.

Cuando una de las Cámaras de las Cortes Generales -y en este caso han sido las dos las que han dado curso a la petición- traslada una petición ciudadana a un Ministerio, sin proceder a su archivo o a su retención en el ámbito interno parlamentario, la decisión conlleva un implícito respaldo a la petición, al entenderla merecedora de que la misma llegue a los responsables gubernamentales por conducto parlamentario. Para valorar una decisión como la adoptada por el Senado basta recordar que, hasta la fecha, ninguna de las peticiones formuladas por esta Asociación a las Cortes de Aragón ha sido trasladada al Gobierno de Aragón, acordándose invariablemente su archivo o su simple remisión a los Grupos Parlamentarios, envío que normalmente ya ha sido realizado con carácter previo desde la propia Asociación. Jamás una petición en materia de función pública ha sido remitida por la Comisión de Peticiones de las Cortes de Aragón al Departamento de Presidencia del Gobierno de Aragón. Por lo tanto, han de apreciarse las diferencias de tratamiento, por pequeñas que puedan parecer.

Simultáneamente a la presentación de estas peticiones ante las Cortes Generales o a la remisión de la sentencia a numerosas entidades locales españolas, se está llevando a cabo una campaña de divulgación de la sentencia del Tribunal Supremo con diferentes medios de comunicación, del que es buen ejemplo la noticia difundida hoy mismo por la agencia Europa Press, de la que se han hecho eco inmediato un importante número de medios de información, en sus versiones digitales, incluyendo la página de Telecinco. Se trata de sensibilizar a instituciones y medios de comunicación de la importancia que tiene el respeto del derecho de acceso de los ciudadanos a la función pública para preservar el modelo constitucional de Administración Pública, asegurar su profesionalidad y su carácter democrático y evitar que el descrédito de lo público prosiga imparable con el incumplimiento generalizado de las normas, menoscabando con ello el vigor del Estado de Derecho.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Si se consideró un triunfo democrático la aproximación de los ámbitos de decisión política a los ciudadanos que suponían las autonomías, la práctica ha venido a demostrar que no ha habido tal avance. La existencia de unas Cortes de Aragón ahí mismo, a la vista de todos los ciudadanos que transiten por allí, no las ha hecho ni más próximas ni más democráticas.

Así, las autonomías no suponen un avance democrático, sino, cuando se comportan como se denuncia en el artículo, una involución. Y además son más caras.

O sea, hemos hecho un pan como unas hostias.

Anónimo dijo...

http://blogs.heraldo.es/entrelineas/?p=1883

Impresionante

Anónimo dijo...

¡Que fácil es generalizar y demonizar!

Las Comunidades Autónomas son buenas, los que no son buenos son los que las dirigen, los que las gobiernan, los que las "ocupan".

Confiemos en los empleados públicos, los empleados competentes, los empleados eficientes, los empleados con vocación de servicio público.

Seamos democráticos y constructivos.