miércoles, 14 de abril de 2010

BOCHORNO PARA BRUN Y VELASCO.

El hecho de que sea un sindicato de la función pública aragonesa el que ofrezca datos sobre las magnitudes y evolución del personal de la Administración autonómica, indicando el porcentaje de interinidad existente o el número creciente de personal contratado en las empresas públicas creadas por el Gobierno de Aragón, debiera suponer para los responsables de la Dirección General de la Función Pública, Antonio Brun, y del propio Departamento de Presidencia, Javier Velasco, un verdadero bochorno.

No es de recibo que los ciudadanos,los parlamentarios y los propios servidores públicos obtengamos datos -cuyo grado de fiabilidad desconocemos- sobre la dimensión y situación de la función pública autonómica, gracias a la labor de análisis realizada por un sindicato, cuando no hace mucho tiempo el propio Director General de la Función Pública, Antonio Brun, hacía público un documento, en el que se efectuaba un supuesto diagnóstico sobre la Función Pública de la Comunidad Autónoma, en el cual no figuraba ni un solo dato sobre la función pública diagnosticada. Pero, ¿existe acaso personal en la función pública aragonesa? Cabía llegarse a formular dicha pregunta, pues el Director General se mostró incapaz de ofrecer o precisar un solo número -aportar una sola cifra- sobre el empleo público autonómico, y dicho diagnóstico no lo exponía ante los medios de comunicación, sino ante la Comisión Institucional de las Cortes de Aragón. Pese a incurrir en despropósito semejante, no le faltaron los aplausos de los diputados.

Más tarde, la misma Comisión Institucional rechazaba una iniciativa parlamentaria por la que se instaba al Gobierno de Aragón, a través de su Departamento de Presidencia, a publicar un boletín estadístico periódico con los datos de evolución del empleo público autonómico. La mayoría parlamentaria que sostiene al actual gobierno de coalición se mostró partidaria de que la realidad de la función pública, la más objetiva -la que se desprende de los simples números- no fuera conocida ni por el Parlamento aragonés ni por los ciudadanos. La empresa de todos no rinde cuentas a nadie: curiosa paradoja.

Bochorno sobre bochorno, por lo tanto, cuando la falta de datos del Gobierno se tiene que contrarrestar con datos ofrecidos por los sindicatos, sobre los que, como viene siendo normal, no hay comentario alguno por los responsables de la función pública. Confirmar o desmentir los datos ofrecidos por el sindicato sería ya aportar información, y no parece que nada de ello entre en sus planes.

¿Alguien es capaz de imaginar que el Gobierno no facilitase los datos de evolución del IPC o del PIB, y que dichos datos se hicieran públicos por las organizaciones empresariales, o que los datos sobre desempleo no los diesen organismos oficiales sino las organizaciones sindicales? ¿Qué ocurre en Aragón? ¿Existe algún objetivo, por mínimo que sea, para avanzar en transparencia y rendición de cuentas por parte de los responsables de la función pública?

36 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Pero qué sindicato?

Anónimo dijo...

UGT ha afirmado que el 20% de los empleos públicos en la DGA son de carácter temporal. Asimismo, han dado a conocer que el 60% de los empleos públicos de las comarcas también son temporales, un porcentaje que aumenta hasta el 80% en el caso de los empleos femeninos.

ARAGON DIGITAL.

Anónimo dijo...

Zaragoza.- La Federación de Servicios Públicos de UGT Aragón ha dado a conocer que el 20% de los empleos públicos en la DGA tienen un carácter temporal. Además, el sindicato ha trasladado que en cinco años el número de puestos de trabajo ha disminuido en 600 personas. Así, para UGT en los últimos años ha disminuido el empleo público y ha aumentado su precariedad.

La Federación de Servicios Públicos de UGT Aragón ha presentado un informe sobre la evolución del empleo público en las comarcas, las empresas públicas y la administración de Aragón. El sindicato ha dado a conocer que en la Administración General de la DGA se han perdido entorno a 600 empleos desde 2005 hasta 2009. “Ha aumentado de una forma notable la precariedad laboral, el personal fijo en la DGA era en el 2005 del 72% sobre el total de 10.400 empleos y hoy es de un 68% del total de 9.800”, ha declarado el secretario general de FSP UGT Aragón, Daniel Alastuey.

En lo que se refiere a entidades de derecho público, empresas y fundaciones el presupuesto para personal era de más de 55 millones de euros en el año 2006 y en 2009 se ha registrado un gasto de más de 107 millones de euros. En cuatro años se ha doblado el presupuesto dedicado a este personal, “estamos hablando de muchísimos trabajadores, ya que hemos pasado de 1.500 a 3.000 trabajadores”, ha afirmado Alastuey.

Sobre el empleo público en las comarcas Alastuey ha destacado que el 60% del personal que trabajaba en 2009, 2.210 personas, era un personal que desempeñaba su labor “en precario, en un puesto de trabajo temporal”, y que al tener en cuenta el empleo femenino este porcentaje llega hasta el 80%En 2005 en las comarcas se registraban 1.721 personas en empleo público una cifra que ha aumentado hasta las 2.210 personas en el año 2009.

Con este balance, Alastuey ha aseverado que las perspectivas para el empleo público en Aragón “no son nada halagüeñas”. Entre las soluciones que plantean está la de mejorar la planificación de recursos y eliminar los índices de precariedad. Para ello el sindicato aboga por un nuevo pacto para el empleo público en Aragón y una nueva Ley para la Función Pública. Por otro lado, se ha referido a la reforma laboral planteada en la última semana por el Gobierno, sobre ello, ha declarado que “los trabajadores no deben pagar la salida de la crisis”. “Desde UGT no vamos a aceptar ningún recorte en los derechos de los trabajadores”, ha concluido.

Seminario

Asimismo, se ha presentado el primer Seminario de Gestión de los Servicios Públicos en Aragón, que se celebrará en Zaragoza los próximos 15 y 16 de abril. Con motivo de la celebración de los 20 años de la FSP de UGT Aragón se va a celebrar este encuentro que consta de tres mesas redondas y una conferencia. Las tres mesas tratarán sobre la Administración Local, Ley de Dependencia y la política de comarcalización.

Entre los ponentes se encuentran políticos, sindicalistas y empresarios. El objetivo es crear un foro de debate sobre los Servicios Públicos en Aragón.

ARAGON DIGITAL.

Anónimo dijo...

Leo en la hoja informativa de un sindicato que si se aprueba la nueva Ley de Función Pública el grado personal consolidado desaparece. ¿Es eso cierto? ¿Es eso lo que pretenden Brun y Velasco?

Anónimo dijo...

Todo un ejemplo de transparencia:

Parece que el Gobierno central ha tasado los activos que cede al Gobierno de Aragón en trescientos millones de euros, muy por debajo de la deuda reconocida por las mermas tributarias.

El Gobierno de Aragón ha aceptado ese acuerdo, argumentando que sus tasaciones dan a esos activos un valor de 530 millones.

Pero ahora resulta que no se sabe, ni se dice, quien ha efectuado esa tasación. Un tema apasionante de indagar.

Por supuesto, no se tiene noticia de que Larraz haya dimitido o haya sido cesado.

Anónimo dijo...

El ciudadano es el que paga cara la corrupción.

La población apenas percibe el perjuicio directo del enriquecimiento de los cargos públicos - Los grandes escándalos devastan la imagen de toda la clase política, pero sólo afectan al voto a largo plazo.

EL PAIS.

Anónimo dijo...

La estrategia de defensa del ventilador o del calamar (echar la porquería por todas partes), la tesis de la manzana podrida o, a las malas, del árbol podrido (culpar a personas concretas y no a una parte amplia de la organización). Las elecciones no se ganan, se pierden, suele recordarse en los circuitos políticos. Por eso, cuando surge un gran escándalo de corrupción vinculado a altos cargos de un partido político, la principal preocupación de sus estrategas no siempre tiene como principal prioridad limpiar su imagen, sino más bien ensuciar la de su principal contrincante en las urnas. Este tipo de comportamientos, que están muy generalizados, según sociólogos y politólogos especialistas en el análisis de estos temas, deterioran enormemente la imagen de toda la clase política. "Todos los políticos son unos corruptos". Esta tan manida como devastadora afirmación, para la política y para la democracia, se usa alegremente en la calle para poner en tela de juicio la gestión de todos los que acceden al poder. La presunción de inocencia se convierte así en el sentir popular en presunción de culpabilidad y el político se ve al final abocado a demostrar que no roba. El caso Gürtel es la última trama destapada de corrupción política que implica a más de una manzana del PP, de una rama y probablemente a varios árboles.

EL PAIS.

Anónimo dijo...

Comentario:

Los primeros en denunciar la corrupción tendrían que ser los mismos compañeros de partido y no tapar al corrupto y pedir parte. Ahí es donde deberían incidir las direcciones generales. La segunda parte debería ser despolitizar al Poder Judicial y que éste huyera de relacionarse con la clase política más de lo estrictamente necesario.

Anónimo dijo...

Comentario:

Me parece bochornoso que todos estos"chorizos",sigan teniendo un puesto de trabajo y no se les cese de inmediato de TODOS sus cargos;me de igual el partido(al final de esta especie "choricera",tienen en todos los partidos). Señores como les explicamos a nuestros hijos,que los que representan al pueblo,son los que se están llevando el dinero ,que es para nuestra sanidad,educación,infraestructuras...???? Menudo ejemplo...yo no quiero que ninguno de mis hijos en un futuro sea tertuliano de televisión ni politico.

Anónimo dijo...

"Un caso así afecta a la imagen de todos, pero la ciudadanía sabe distinguir. En una encuesta reciente del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) sobre el tema quedó claro que la gente ve ahora más corrupto al PP que al PSOE, incluso los votantes del PP", afirma el catedrático de Ciencias Políticas y de la Administración de la Universidad Rey Juan Carlos, Manuel Villoria, que dirige además el Departamento de Gobierno, Administración y Políticas Públicas del Instituto Universitario de Investigación Ortega y Gasset. "No obstante", prosigue Villoria, "los políticos o la clase política son el tercer problema más importante para los españoles. Y este último dato surge a partir, sobre todo, del caso Gürtel y de la suma de casos de corrupción urbanística que se condensan a finales del 2009. Cuando la corrupción política aparece en primera página de la prensa de forma continua, una de las consecuencias es ésta, que la clase política se convierte en problema".

EL PAIS.

Anónimo dijo...

Antes hubo otros casos, desde finales de los ochenta a principios de este siglo -Naseiro (PP), Filesa (PSOE), el caso saqueo o Marbella (GIL) -, aunque en las últimas décadas han sido más puntuales, ninguno tenía un entramado tan amplio como el Gürtel. Son redes complejas, complicadas de desgranar para los jueces y, por tanto, ni que decir tiene de entender para el común de los mortales. La ciudadanía, dicen los expertos, se queda sólo en la letra gorda. La de los grandes titulares y la de las frases impactantes de los diversos partidos del arco parlamentario. El mensaje de que ha habido corrupción, presunto enriquecimiento ilícito mediante la utilización de cargos y fondos públicos, llega a la población, pero en la mayoría de los casos los ciudadanos lo perciben como casos ajenos a ellos, a su vida, señalan los analistas. No acaban de ver que dar una concesión de un terreno urbanizable por un valor inferior al real repercute en las arcas públicas del ayuntamiento correspondiente, lo que supone un perjuicio directo para los ciudadanos de ese municipio. Se deja de ingresar en él dinero que se dedicaría a la sanidad, la educación o las carreteras de todos para destinarlo a fines ilícitos, del enriquecimiento individual a la financiación de una organización privada, como es un partido político.

EL PAIS.

Anónimo dijo...

Comentario:

Pedir auditorías para las cuentas municipales cada vez que cambia un alcalde. Cuesta dinero, pero está bien empleado y al final sale a cuenta.

Anónimo dijo...

Comentario:

La corrupción en España lleva camino de ser lo que en Italia. Donde hay abundante miel acuden abundantes moscas, amparándose en el derecho a buscarse la vida. Los mafiosos educan a sus hijos en la ocultación y el silencio y así se aseguran las proles que heredarán el método cuya primera regla o mandamiento es la ocultación - "me avala la facultad legal de no responder", dirán amparándose en la Ley ante cualquier acusación en tribunales-. Y tira que te vi o suma y sigue. ¿Qué quieren que piensen los ciudadanos honrados?

Anónimo dijo...

Esta baja percepción de las consecuencias de esta corrupción en la vida de los ciudadanos es uno de los factores que hace que el voto apenas se mueva. Al menos a corto plazo. A largo, la razón por la que se mueve suele ser el hartazgo.La estrategia de los partidos ante estos casos corruptos es diferente según el tamaño de la institución y el poder que tenga. "El PP ha optado, a través de sus apoyos mediáticos, por recordar Filesa y los escándalos pasados (estrategia del calamar)", analiza Villoria. "Y, lo que es más preocupante, ha intentado destruir la reputación y la imagen de todo el que ha investigado el caso -la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) o Garzón- o lo ha denunciado, el caso del pobre sastre es terrible. Es una estrategia muy dura, ya veremos los resultados", agrega.

Un enfoque del que se habla poco son las consecuencias que tiene la corrupción a largo plazo. La mayor parte de los analistas coinciden en que los efectos en los partidos son limitados. Por lo tanto, al que al final le sale más cara la corrupción es al ciudadano. Una parte de sus impuestos se evaporan en esas corruptelas por agujeros diversos y deja de percibir servicios públicos o una mejora de su calidad de vida, que podrían obtenerse con el dinero evaporado por los corruptos.

EL PAIS.

Anónimo dijo...

El catedrático de la Universidad Autónoma de Madrid y presidente de Transparencia Internacional España, Jesús Lizcano, señala que la valoración negativa de la clase política y de los partidos "es bastante generalizada en la mayor parte de los países", según pone de manifiesto el Barómetro Global de la Corrupción, un índice que elabora su organización a nivel internacional. Y los ciudadanos, ante el hastío que les causan estos casos, "deciden no votar en las elecciones, o bien votar en blanco, como rechazo ante la clase política, o votar a partidos nuevos, que no están contaminados por casos de corrupción y contienen mensajes singulares", explica Lizcano.

EL PAIS.

Anónimo dijo...

Comentario:

Todos los corruptos fueron niños y fueron a la escuela, y en aquel tiempo nadie les corrigió las mentiras que contaban o las verdades que ocultaban; tampoco leyeron Pinocho y si lo hicieron, no lo entendieron porque nadie se encargó de explicárselo. Hoy también tenemos en la escuela niños mentirosos a quienes posiblemente nadie les corrige las mentiras.

Anónimo dijo...

Comentario:

confianza? es imposible tener confianza en estas personas,sólo miran por ellas y se sostienen unas a otras a través de una tupida red de chantajes,favores inconfesables y amenazas veladas,casi invisible para el resto de los mortales;la Justicia tiene un gigantesco reto por delante para poner fin a todo este clientelismo,endogamia y apesebramiento que se ha instalado en la clase política,sindical y empresarial. No somos como Grecia,no,somos PEORES.

Anónimo dijo...

Tanto el secretario del Área de Ciudades y Política Municipal del PSOE, Antonio Hernando, como el secretario Nacional de Política Autonómica y Local del PP, Juan Manuel Moreno, coinciden en que los grandes escándalos de corrupción perjudican a toda la clase política. Ambos opinan que estos escándalos, aunque no pasen factura a corto plazo, sí tienen un gran coste para la política. "El ciudadano sí deduce cuándo un comportamiento es inmoral, indecente, aunque no conozca los detalles del caso", opina Hernando. "La gente intuye que la perjudicada por estos casos es toda la ciudadanía". Es estos casos lo importante es, según este responsable socialista, actuar con "contundencia, coherencia y salvaguardar la institución. No vale adoptar medidas internas y dejar a esas personas en las instituciones, sean ayuntamientos o las que sean. Porque la intolerancia con estos casos tiene que ser total e inmediata". ¿El PSOE ha aprendido la lección después de los escándalos de los noventa? "Sí, ha demostrado que ha sido muy contundente ante los casos de corrupción, no se ha tardado ni 24 horas en tomar medidas", contesta Hernando. Y pone como ejemplo el caso del Ayuntamiento de Coloma de Gramanet: "El mismo día que se destapó, por la tarde, el alcalde estaba expulsado del partido y había dejado su acta de concejal".

Desde el PP, Juan Manuel Moreno asegura que estos casos "son la primera amenaza que tiene un partido, la clase política y el sistema democrático". Y apunta varias responsabilidades: "El primero es el político corrupto y es al que hay que perseguir. Pero luego hay otros niveles de responsabilidad. Los partidos políticos, por ejemplo, que han utilizado los casos de corrupción para desgastar al adversario. Pero es importante tener en cuenta que son estructuras muy amplias, con cientos de cargos públicos y, desgraciadamente, es muy difícil de controlar a todos. Pero estos casos no afectan ni al 0,1% de ellos, la inmensa mayoría de los políticos es gente honesta, en la que se puede creer, que se vuelca, por ejemplo, en la política municipal, haciendo un sacrificio en muchos casos".

Este responsable del PP también reconoce que, a raíz del caso Gürtel, su partido se ha vuelto más severo internamente. "Ya pensábamos desde hace tiempo la conveniencia de tener un código ético, como tienen muchas empresas privadas. Todos los cargos públicos y miembros de los órganos del partido deben firmarlo, comprometerse. A partir de ahora, es más difícil que haya casos de este tipo, el compromiso con la transparencia y la buena administración de los cargos políticos es claro y también las consecuencias". ¿Cuáles son? "Tiene que haber un equilibrio entre la presunción de inocencia y la situación de presión social a través de los medios, porque ha habido casos que luego la justicia ha archivado o sobreseído. Pero cuando hay indicios claros o condenas firmes, es más duro, se expulsa al afectado del partido y se le inhabilita".

EL PAIS.

Anónimo dijo...

Comentario:

La corrupción y el aprovechamiento los vemos por todas partes en este país. Yo no sé de dónde saca un enfermero que puede "distraer" un poco de alcohol o un profesor que tiene derecho a llevarse unos folios -discúlpenme los citados y háganlo extensivo a muchas otras profesiones-. Bueno en realidad creo que lo sacan del régimen anterior en el que siendo "afín" -fascista, vamos- todo te estaba permitido y para los demás quedaba la zarzuela: "aprende a sisar". Esta visión de los políticos permanece porque no nos dan motivos para pensar de otra forma. La "comunión" ideológica con la izquierda o con la derecha es difícil de cambiar para los que "comulgan". Como mucho ante la barrabasada de los "propios" consideran la abstención. A más extremismo del partido, más comunión. ¿Cómo afecta esto al "centro-derecha" en España. En las próximas elecciones lo veremos. Entretanto oficiemos: ¡El cuerpo incorrupto del PP! ¡Amén!

Anónimo dijo...

Comentario:

El ciudadano que olvide su único grano de decisión, que es el poder votar, debe también olvidar todos los derechos de protestas, ya que de forma alguna su protesta es el voto, con el cual castiga al partido que considere más injusto, no votandole, pero creo que el voto es un derecho que todos debemos cumplir, recordemos la frase que dice.. no es tan perverso, el malo, como la pasividad de los buenos,.Así que siendo democrata, nunca olvidemos el único derecho y castigo que podemos ejercer, que nadie falte a VOTAR.

Anónimo dijo...

Comentario:

La casta politica esta compuesta practicamente por iletrados que lo unico que han hecho en su vida ha sido desempenar cargos publicos sin necesidad de demostrar su valia para los mismos. Esta falta de conocimientos y valia se traduce en la necesidad de llevar consigo a una coorte de asesores que son quienes les mueven los hilos. La democracia actual es un espejismo por este motivo, por la creacion de una casta politica cuyos unicos meritos en la vida han sido el desempeno de cargos publicos sin conocer nada del mundo real. Paradogicamente cuando salen de politica, y tienen contactos, es cuando van a la empresa privada y no al contrario como seria deseable. Estos politicos son quienes deciden quien entra a formar parte de su clase privilegiada, son ellos y solo ellos quienes dan acceso a la politica; esto hace que la democracia no sea tal y fomenta la creacion de una nueva aristocracia que ostenta los poderes.

Anónimo dijo...

A pesar de las explicaciones de los portavoces de los dos partidos mayoritarios, Lizcano insiste en que "el control interno de los partidos es manifiestamente mejorable y, de hecho, la nueva ley de financiación de los partidos les exige un mayor control interno". Y remite al último informe del Grupo de Estados Europeos contra la Corrupción (conocido como el Greco), que "pone de manifiesto que hay todavía lagunas en la legislación española, resalta que no existe suficiente información y tampoco un adecuado control en las fundaciones y empresas vinculadas a los partidos". Y añade Lizcano otra pega: "Se exige fundamentalmente control a nivel agregado o nacional, sin que los partidos informen sobre sus cuentas en las entidades locales, que es donde radican en muchas ocasionen los casos de corrupción, sobre todo urbanística".

EL PAIS.

Anónimo dijo...

El experto internacional en temas de corrupción y Gobierno Víctor Lapuente hace un detallado análisis desde el departamento de Ciencia Política de la Universidad de Gothenburg: "A nivel comparado, con independencia del contexto sociocultural y económico o de la ideología del partido, es frecuente encontrar sistemas políticos donde la corrupción tiene efectos electorales muy limitados. Pero parece que los medios de comunicación juegan un papel importante para limitarlo".

En España no hay muchos estudios concluyentes todavía, recuerda Lapuente. Unos dicen que no hay consecuencias. Otros, ponen en duda que no las haya, aunque con cautelas.

Pero, como se mencionaba antes, la corrupción sí tiene otras consecuencias que afectan más directamente al bienestar de los ciudadanos. Lapuente aporta unos clarificadores datos al respecto: "La idea es que la corrupción daña lo más vulnerable y esencial para el desarrollo social, económico y político de un país, que es la confianza, tanto en las instituciones públicas, de lo que se habla bastante, como en el resto de nuestros conciudadanos, de lo que se habla muy poco, a pesar de que es importante. Lo que se denomina 'confianza social' (un concepto controvertido, pero muy relevante en ciencias sociales) se erosiona gravemente. La razón es que el hecho de que los agentes públicos sean corruptos, en lugar de imparciales, actúa como una señal para los ciudadanos de cuáles son las reglas de juego en la sociedad. Ello conlleva a un deterioro de las interacciones humanas, que genera efectos negativos, tanto económicos como sobre casi cualquier ámbito de la vida".

Los estudios corroboran estas afirmaciones. Los especialistas Holmberg, Rothstein y Nasiritousi, analizaron y resumieron en 2008 decenas de estudios sobre los efectos de la corrupción en hasta un centenar de países. En sus conclusiones se puede ver cómo la corrupción presenta unas correlaciones altísimas con todo lo malo que le pueda pasar a un país. Así, el resultado es que la corrupción lleva en muchos casos a estas consecuencias: menos crecimiento económico y menor renta per cápita; más paro; más desigualdad económica (la corrupción afecta más a los más desfavorecidos); menos esperanza de vida y menor percepción subjetiva de salud; peores indicadores de sostenibilidad medioambiental, y menos Estado del Bienestar en general.

EL PAIS.

Anónimo dijo...

Comentario:

Sé es corrupto antes que político, empresario, clérigo o trabajador. Ni son todos los que están, ni están todos los que son. Ahora bien, quien ampara a los corruptos (por la razón que sea) es simplemente cómplice, osea, corrupto o bien es "bobo" y quiere un universo poblado de ladrones para sus hijos.

Anónimo dijo...

Comentario:

El ciudadano paga la corrupcion que mantienen los politicos y estos a su vez protegen a los jueces que les protege de los ciudadanos.Moraleja si eres politico corrupto protege bien a los jueces (eso lo describio muy bien Al Capone)

Anónimo dijo...

Comentario:

Es verdad pero en todos los foros hay un clamor popular: que se devuelva el dinero robado, que los que roban no sigan en la administración, que las personas involucradas que tengan indicios claros se les aparte de los cargos que ocupan, en definitiva, que el ciudadano perciba claramenate que se toman medidas drásticas, si no se hace así estará, de alguna manera justificado que los ciudadanos no confien en el sistema y el sistema son todos los poderes del estado, en el Caso Gurtel por ejemplo se sabe desde hace mucho tiempo quienes se están lucrando de manera ilegal con recursos públicos y los responsables siguen en sus cargos cuando no el mismo partido los cambia de puesto manteniéndole todos los privilegios, diciendo a continuación que han tomado medidas, el ciudadano no es tonto y sabe que no se ha hecho nada y que el corrpto sigue en puestos de riesgo y llevándose diero público, esto es lo que ocurre y lo que justifica que la opunión pública no crea en la clase política, en España se ha perdido la sana costumbre de dimitir cuando se descubre que se ha hecho algo ilegal, cosa que en Europa no sucede.

Anónimo dijo...

Comentario:

"España, la reserva espiritual de Occidente" ¿Cuantas veces hemos escuchado eso? Pues, ¡Caray! Era otra mentira

Anónimo dijo...

Así las cosas, nadie se atreve a señalar algo concluyente sobre por qué, por ejemplo, tras destaparse el escándalo Gürtel, en el último barómetro del CIS que recoge la intención de voto, del pasado enero, el PP (con un 40% de estimación de voto válido) está casi cuatro puntos por encima del PSOE (con un 36,2%). Pero los expertos refrescan en la memoria situaciones pasadas. A Felipe González le afectaron lo suficiente escándalos de los noventa (los de Filesa y Roldán) como para perder las elecciones en 1996 y posibilitar la mayoría absoluta al PP en 2000. A González, según datos de Manuel Villoria, le afectó en realidad poco porcentualmente, pero fue suficiente: "El 2% de votos que le hicieron perder". Es pronto, según los analistas, para hablar de los efectos sobre el PP del caso Gürtel. Villoria opina que "si las elecciones generales fueran mañana, seguro que algo le afectaba, y ese algo podría ser determinante".

EL PAIS.

Anónimo dijo...

Otro de los principales expertos en los efectos de estos escándalos es en el voto en España, Fernando Jiménez, profesor de Ciencia Política y de la Administración en la Universidad de Murcia. "No hay una conexión automática o espontánea entre revelación de corrupción y castigo electoral", coincide. "Hay toda una serie de factores o condiciones que median en esta relación. Si falla alguna de ellas, la conexión quiebra y puede no haber castigo. Las razones pueden ser muy diversas. Pero con mucha frecuencia (y este parece ser el caso en Valencia o en Murcia), la gente no es capaz de visualizar que exista realmente una alternativa creíble de gobierno. En esos dos casos, el PSOE ha estado inmerso en una interminable y demoledora batalla interna que los desacredita como opción de gobierno, lo que ha dejado un margen de actuación formidable para el PP".

Los partidos siguen estrategias precisas, pero Jiménez considera que no han hecho "realmente nada que les haya llevado a tomarse el problema de la corrupción realmente en serio". "Las medidas han sido defensivas e hipócritas. Primero, negar las acusaciones y tratar de desprestigiar a los acusadores y restarles credibilidad. Después, si el caso seguía adelante, viene la estrategia de las manzanas podridas: deshacerse de los individuos directamente afectados. Y simultáneamente se emprenden dos estrategias relacionadas con la tramitación judicial de los casos: primero, confundir responsabilidad política con penal y reducir aquélla a ésta como una manera de retrasar la toma de decisiones, algo que es demoledor para la salud del sistema democrático. Y segundo, tratar de desactivar el proceso judicial con triquiñuelas procesales".

EL PAIS.

Anónimo dijo...

Comentario:

Uno se siente impotente y cabreado, sobre todo porque no se ve la solución, la corrupcion es tan antigua como el" oficio mas antiguo del mundo" por lo tanto forma parte de los genes de la especie humana , ya no existen ideologías políticas, no se salva nadie y como el nivel cultural de España siga por estos derroteros " apaga y vámonos"

Anónimo dijo...

Comentario:

y luego se le echa la culpa del descalabro a la clase menos favorecida...los emigrantes

Anónimo dijo...

En relación con el control interno de los partidos, aporta la perspectiva internacional Víctor Lapuente: "El control interno de los partidos falla porque hay incentivos muy poderosos a no desvelar la corrupción de tus compañeros de partido. A diferencia de en otros países de nuestro entorno, los partidos en España son 'unidades de destino en lo universal' donde la lealtad, entendida en términos más personales que ideológicos, es un valor supremo". ¿Y qué pasa en el caso de que se produzcan los disensos internos dentro de un partido, tengan o no que ver con la corrupción? "Entonces es curioso ver que, mientras en otros países los partidos parecen dividirse un poco más de acuerdo con posicionamientos ideológicos -por ejemplo, se habla de 'el sector más liberal' frente al 'sector más conservador'-, en España, la lealtad interna parece que está más basada en relaciones personales -por ejemplo, zaplanistas o zapateristas, aguirristas o guerristas-", concluye.

Al poner ejemplos de otros países del entorno de España, todos los especialistas miran con mayor preocupación hacia la bota del mapa: "El caso más dramático de escándalos continuos de corrupción en una democracia avanzada es el de Italia", en palabras de Manuel Villoria. "La respuesta judicial se llamó mani pulite y no está de más compararlo con la España actual".

EL PAIS.

Anónimo dijo...

Comentario:

Ya va siendo hora que nos mentalicemos que todo ésto NOS CUESTA DINERO A TODOS. El dinero que desaparece de los casos de corrupción ES NUESTRO, ES EL DINERO QUE NOS ROBAN IMPUNEMENTE.

Anónimo dijo...

¿Y qué papel le queda al funcionario público en la lucha contra la corrupción?

Anónimo dijo...

¿Poder?

Anónimo dijo...

No puedo creerlo.