domingo, 4 de enero de 2009

COMPARECENCIA DE LA ASOCIACIÓN ANTE LAS CORTES DE ARAGÓN: INTERVENCIÓN DE CHESUS BERNAL, PORTAVOZ DEL GRUPO PARLAMENTARIO DE CHUNTA ARAGONESISTA.

Zaragoza. 4 de enero de 2009.

El pasado día 25 de noviembre de 2008, tuvo lugar la comparecencia de los representantes de la Asociación para la Defensa de la Función Pública Aragonesa ante la Comisión de Peticiones y Derechos Humanos de las Cortes de Aragón.

De acuerdo con lo solicitado a la Letrada Mayor de las Cortes de Aragón, nos ha sido facilitada la transcripción de dicha sesión, con la advertencia de que la misma no está todavía revisada por el Servicio de Publicaciones de la Cámara. Con dicha salvedad, por lo tanto, procedemos a reproducir las intervenciones de los distintos portavoces de los Grupos Parlamentarios, por orden de intervención.

Reproducimos a continuación la intervención realizada por el diputado Chesus Bernal, como portavoz en la Comisión del Grupo de Chunta Aragonesista:

Muchas gracias, señores Guiral y Gracia, representantes de la Asociación para la Defensa de la Función Pública Aragonesa.
Les voy a decir “gracias” como portavoz de Chunta Aragonesista, pero también “gracias” como ciudadano. Gracias por existir, por el hecho de que ustedes existan, y por el hecho de que no caigan en el desaliento. Por ese mismo hecho yo les agradezco que existan.
Les agradezco que sean como son y que planteen las cosas que plantean; eso, como ciudadano. Luego les agradeceré como portavoz alguna otra cosa, porque en contra de un leve pesimismo que he creído detectar en la intervención del señor Guiral en torno a la utilidad de su actuación, yo les puedo asegurar que a mi grupo parlamentario algunas de sus reflexiones nos han servido, y algunos de los documentos que nos suelen mandar, desde que nos conocimos en una reunión cuando ustedes nacieron, vinieron, se presentaron a los grupos parlamentarios (creo que a todos los grupos parlamentarios), tuve ocasión de conocer la asociación, y les puedo asegurar que cuando llega el sobre con sus recomendaciones, con sus reflexiones, enseguida coloquialmente decimos que “ya nos han mandado algo los de la asociación de la función pública aragonesa”. (Además, como utilizan siempre el mismo tipo de letra de ordenador, son bastante reconocibles.)
Mire, vivimos en un momento en el que lo más “recomendable” –entre comillas lo de recomendable- es dejar hacer, el “laissez faire, laissez passer” aplicado a la propia existencia y a la participación en torno a lo que nos rodea. Es decir, “laissez faire, laissez passer” es algo así como decir: esto no va conmigo, yo a lo mío, y dejarse llevar por la inercia. Digo “por la inercia” por no hablar de algo que se refleja detrás de la inercia, que es la pereza mental y también la pereza procesal.
Desde ese punto de vista, claro, el que ustedes existan, el que ustedes nazcan tomando, de acuerdo con el Estado social y democrático de Derecho, las reglas del juego que se han dado y que decidan, para mí ese aspecto que no conocía, que ustedes acaban de indicar: eso de que entre los principios o condiciones de su asociación está la de “queda excluida la recepción de fondos públicos”, eso es como un maná que cae en el mundo en que vivimos y en la sociedad en que vivimos, en el Aragón de estos años (con todo lo que hay detrás de lo que quiero decir del Aragón de estos años), es como un maná que cae… Vamos, que es absolutamente refrescante.
Porque ustedes, finalmente, lo que son como asociación es una asociación que se toma en serio el implicarse, y para implicarse ustedes parten de una situación de consciencia. Es decir, ustedes son conscientes de lo que les rodea, pero además de ser conscientes (que no es poco, porque hay mucha inconsciencia suelta por ahí, en ese dejarse llevar, que la nave vaya poco a poco a donde vaya, ¡qué más da!, pero que suavemente se vaya meciendo), pues, ustedes deciden ser conscientes. Ser conscientes y no dejarse llevar a ese “laissez faire, laissez passer”, sino que además de conscientes trasladan una inquietud, una inquietud personal, inquietud colectiva, y osan además –entiendan lo de “osan”, lo osan…, lo digo como algo positivo, pero que no se lleva-, osan además hacerlo público, su inquietud, su consciencia, y decir que además, como el Derecho les ampara, quieren participar como ciudadanos en los asuntos públicos. Y no desde cualquier perspectiva, sino además haciendo propuestas, tomándose en serio lo que muchas veces los poderes públicos no se toman en serio, que es otro tanto como decir que cuestionan los propios cimientos de su propia existencia.
Pues bien, ustedes deciden hacer propuestas para la mejora del Estado de Derecho, para la mejora del servicio público (porque hay veces que, a pesar de que estamos en el siglo XXI y en un Estado social y democrático de Derecho, sí que es cierto que el servicio público de la Administración hace pensar en todos aquellos males previos a Larra, todavía, ahora, en el siglo XXI, y algunos que habían sido desechados, luego, por la fuerza de los hechos, son recuperados). Pues, yo creo que es como una bendición que ustedes existan, y que ustedes se preocupen por…, yo casi, casi, diría como unas personas que creen en los principios del arranque de la democracia en España hace treinta y tantos años.
A mí eso me llena de satisfacción, porque ya digo que no es lo que se lleva, no es lo más fashion, no es lo más fashion, lo que ustedes representan. Y no tienen más que echar un vistazo, para lo que digo, a su alrededor. Porque ustedes -me atrevo a decir- son una excepción entre su propio colectivo; porque entre su propio colectivo lo que se lleva no es lo que ustedes están haciendo, lo que se lleva es otra cosa: es ir, estar, de la mejor manera posible, pasar, tal, y si te he visto no me acuerdo, “y a otra cosa, mariposa”, y al fin de semana próximo, y luego al siguiente.
Entonces, que ustedes además decidan que no quieren fondos públicos para no verse condicionados, para no verse presionados, para no verse influidos…, al final todo eso se llama implicación. Implicación frente a la inercia, como he dicho, frente a la pereza mental, frente a la pereza procesal, y además decir que quieren participar con su propio saber y entender y con los instrumentos que el Estado social y democrático de Derecho les da para participar en los asuntos públicos… Y permítanme un poco que les diga -y yo se lo digo como algo positivo, porque eso me lo han dicho a mí muchas veces-, hacer un poco de “mosca cojonera”. Eso me parece absolutamente positivo, porque cuando ponen por delante la ética, y lo que han denominado, la referencia que ha hecho usted al giro ético, yo creo que hay mucho…, o puede haber gente que les diga que hay mucho en los suyo de ingenuidad. Sí, pues sí, hay de ingenuidad, pero tontos no son. Quiero decir, que ustedes pueden hacerse los ingenuos, pero no los ingenuos naïf que desconocen lo que hay, sino que a pesar de que conocen, y bien, lo que hay, quieren decir que se pueden hacer las cosas de otra manera.
Éste era el agradecimiento que yo les quiero dar como ciudadano, como ciudadano aragonés que tiene el honor de representar a una parte de la ciudadanía aragonesa en esta cámara. Pero además yo les quiero agradecer como portavoz de mi grupo parlamentario sus reflexiones y sus aportaciones.
No se preocupen: usted ha dicho que en las instituciones aragonesas se han echado en saco roto sus iniciativas; yo les puedo asegurar que las habrán echado en saco roto de cara a la galería, pero que hacen mella sus intervenciones, sus reflexiones, sus cartas, sus introducciones en los registros de peticiones… Hacen mella. Otra cosa es que los representantes de las instituciones públicas y altos cargos, como un gesto prepotente…

La señora presidenta (VICENTE TELLO): (…), señor Bernal.

El señor diputado BERNAL BERNAL: Voy a ir terminando ya, señora presidenta.
… Puedan hacer como que son británicos. No son británicos: les puedo asegurar que son aragoneses y españoles, y la flema, por más que pongan flema, les puedo asegurar que es pura pose. Sí que afecta, y sí que progresivamente yo les animo a que sigan por esa vía, porque al final no les quepa ninguna duda de que cada una de las actuaciones que han planteado y que han sido echadas al saco de los papeles, o al cubo de los papeles, tendrán eco.
Y les voy a decir, simplemente, tres de los aspectos fundamentales a los que ha hecho usted referencia hoy, y que los han hecho en sus escritos, han sido recogidos por mí mismo y por mi grupo parlamentario en un interesante debate que vamos a tener próximamente en esta cámara: el del proyecto de ley del presidente y del Gobierno de Aragón. Y los tres aspectos que yo considero fundamentales a los que se han referido (el de la publicidad de los nombramientos de personal eventual del Gobierno de Aragón, el de la aprobación de un código de buen gobierno, y el de regular los conflictos de intereses de los miembros del Gobierno de Aragón y de los altos cargos de la Administración de la Comunidad Autónoma de Aragón), han sido recogidos por mi grupo parlamentario y están publicados en el Boletín Oficial de las Cortes de Aragón para su debate en la próxima tramitación, en la ponencia que estudie el proyecto de ley del presidente y del Gobierno, y que luego vendrá a esta misma sala, a la Comisión Institucional, y que luego se debatirá en el Pleno.
Yo, en ese sentido, he incluido un artículo, hemos incluido un artículo en relación con el primer asunto, diciendo que las resoluciones por las que se acuerde el nombramiento y cese de los directores, jefes y demás miembros de los gabinetes, así como del resto de órganos de asistencia y apoyo previstos…, tal, tal, serán publicadas en el Boletín Oficial de Aragón, y que la publicación del nombramiento será requisito previo para la toma de posesión del puesto por parte del interesado.
Lo mismo, hemos dedicado un título entero para el código del buen gobierno. Y, finalmente –acabo ya, señora presidenta-, también hemos dedicado un artículo entero, una enmienda con un artículo entero, en relación con la consideración de quiénes son altos cargos (miembros del Gobierno de Aragón; viceconsejeros; secretarios generales técnicos; delegados territoriales del Gobierno de Aragón, presidentes; directores, etcétera, de organismos públicos de la comunidad autónoma, de las empresas de la comunidad autónoma, de las sociedades mercantiles, etcétera, etcétera, etcétera), precisamente con el objetivo de superar el antiguo concepto vigente de incompatibilidades y para establecer una nueva regulación más completa, que prevenga por un lado y que dé solución por otro a las situaciones de conflicto de intereses de los altos cargos del Gobierno, de la Administración y del sector público de la comunidad autónoma.
Por lo tanto, para mí es una satisfacción que ustedes estén aquí. Refuerzan a esta propia institución, estando ustedes hoy aquí. La refuerzan. Refuerzan a los propios pilares de la comunidad autónoma y de los poderes públicos de la comunidad autónoma.
No tengo más que agradecerles, como ciudadano y como diputado de estas Cortes, su existencia, y les animo: no hagan caso de las flemas británicas. No existen las flemas británicas: incluso en aquellos que llevan años presidiendo gobiernos, y que parece que son flemáticos, en el fondo, en el fondo, son humanos, aragoneses y españoles.
Muchas gracias.

La señora presidenta (VICENTE TELLO): Gracias, señor diputado. Y una petición le voy a hacer: es usted buen conocedor del refranero español, de los usos idiomáticos, de los usos lingüísticos del castellano, pero le pido que evite utilizar palabras malsonantes en esta comisión. Gracias.

El señor diputado BERNAL: Señora presidenta: ¿A qué palabra se refiere?

La señora presidenta (VICENTE TELLO): No la voy a repetir.

El señor diputado BERNAL: ¡No! Dígamela, porque no he dicho nada...

La señora presidenta (VICENTE TELLO): En el Diario...

El señor diputado BERNAL: ...salvo la palabra “fashion”, que creo que todavía no está en el Diccionario de la Real Academia, las demás están todas en el diccionario...

La señora presidenta (VICENTE TELLO): Ha hecho usted una comparación que no es muy correcta.

El señor diputado BERNAL: ¡No, no!

La señora presidenta (VICENTE TELLO): Yo creo que en el Diario de Sesiones lo podrá usted leer. No la voy a repetir.

El señor diputado BERNAL: ¡No, no! Pero no... No voy a retirar nada, porque yo lo he hecho en sentido positivo...

La señora presidenta (VICENTE TELLO): No le pido que la retire...

El señor diputado BERNAL: ...y de alabanza, y además también figura con ese sentido en el Diccionario de la Real Academia. Gracias.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias por su apoyo moral y logístico Sr. Bernal. No se si los responsables de la administración aragonesa tienen flema inglesa; más bien parece que tienen cara de cemento armado, quizás a consecuencia de la fiebre constructora de los últimos tiempos.
Por cierto, le recomiendo que utilice el término "díptero testicular", mucho más apropiado en los círculos que usted frecuenta.