sábado, 7 de febrero de 2015

MIL NOVECIENTAS NOTAS DE BLOG.



Este blog, nota tras nota, trata de mantener abierto de manera permanente un espacio de reflexión sobre la realidad de nuestra función pública y de nuestras instituciones públicas, cuyo desempeño incide de manera decisiva en el grado de calidad de nuestra democracia y en la fortaleza de nuestro Estado de Derecho. En definitiva, en la atención del interés general y en el respeto a los derechos de los ciudadanos.

Dicha reflexión, en muchas ocasiones, es crítica y censura de la arbitrariedad de los responsables políticos y administrativos y denuncia expresa de la vulneración del ordenamiento jurídico, por lo que hacemos pública no solo nuestra posición u opinión crítica, sino también nuestras acciones emprendidas en defensa de la legalidad, en forma de peticiones, quejas o recursos, tanto administrativos como judiciales. Ejercer la crítica públicamente es, siempre, asumir un riesgo, y quedar inevitablemente sujeto al juicio de los otros, lo que en ocasiones nos sirve para rectificar o reafirmarnos.

No nos gustan sin embargo quienes, ante cada una de nuestras iniciativas, se sitúan como espectadores escépticos y cínicos que lo saben ya todo y que nos advierten que las cosas no tienen solución posible, que todo es perder el tiempo, que no hay tribunal que nos pueda dar la razón, y que, en el improbable caso de que nos la dieran, la sentencia sería papel mojado, pues no se ejecutará nunca. Para ellos democracia parece ser sinónimo de corrupción, y las dos opciones que caben frente a ella es beneficiarse o abstenerse, pero en ningún caso combatirla. El que la combate tiene todas las de perder.

Frente a quienes creen ser sabios por llegar a aceptar el mundo tal como es, aunque las cosas vayan inevitablemente a peor,  aspiramos a ser simplemente ciudadanos comprometidos con aquello que más nos importa, como es el respeto de la ley y la defensa del interés público. Frente a la realidad innegable de la corrupción, solo cabe denunciarla y combatirla con toda la energía de la que seamos capaces. Es indispensable movilizarse contra ella y todo lo que supone de amenaza a los valores democráticos, entre ellos el de la igualdad de los ciudadanos ante la ley. Creemos en el Estado de Derecho y éste nos ha dado razones para seguir creyendo en él, porque nuestros esfuerzos han tenido resultados reales, que han modificado la realidad de nuestra Administración Pública, corrigiendo situaciones irregulares.

Las críticas de este blog no están hechas, en ningún caso, desde la lógica de denigrar la realidad aprovechando cualquier motivo para ello, sino que reaccionamos frente a aquello que creemos incorrecto desde la defensa y reivindicación de los principios y valores de nuestro ordenamiento constitucional.

El que este blog se quede corto, resulte limitado e insuficiente en su tarea de reflexión y crítica, se debe exclusivamente a nuestras limitaciones personales y materiales. Llegamos simplemente hasta donde somos capaces de llegar, aunque mil novecientas notas dan idea de un camino recorrido y un esfuerzo realizado nada desdeñables.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Efectivamente la democracia tendría que ser sinónima de transparencia, participación y de que se cumplan las leyes. Desgraciadamente en este país, se sigue pensando que acceder a un cargo público, significa tener absoluta impunidad para hacer y deshacer según le convenga al político que ostenta el cargo. Es obvio que si esto se da con tanta frecuencia es porque una buena parte de los que deberían denunciar cierto tipo de irregularidades, no lo hacen, bien sea porque sacan un beneficio propio, bien sea porque consideran que todo está perdido antes de empezar y deciden ser testigos pasivos de lo que acontece. Sin embargo, no se dan cuenta que no actuar, ya es actuar, no denunciar las cosas cuando se sabe que están mal hechas, ya implica complicidad con las irregularidades que se cometen. Ser ciudadano honrado requiere implicarse en política y denunciar lo que se hace mal. Porque la política no es un coto privado de nadie, la política significa participación, transparencia y sobre todo velar siempre por los intereses generales y no por el interés privado. Vosotros sois un ejemplo de democracia y de compromiso ciudadano y quien diga lo contrario, esconde intereses de otro tipo que distan mucho de ser los generales. No hay agradecimiento posible a tanta generosidad mostrada por vuestra parte, como es el mero hecho de dedicar tiempo a los intereses generales. Gracias

Anónimo dijo...

Frente a la pasividad de la mayoría, no exenta de queja tertuliana, 1900 notas es un dato incontestable de que hay camino por recorrer y un aldabonazo a nuestras conciencias dormidas.
Desde la depresión o desde el individualismo más cerril o desde la impotencia, cualquier excusa nos sirve a muchos para no implicarnos. Frente a tanto silencio, se alza vuestra voz, siempre reflexiva y comprometida con los valores constitucionales que garantizan nuestra convivencia. Y a ello os venís dedicando con un compromiso, una valentía, una constancia y una generosidad que queda bien testimoniada en estas 1900 notas. Vuestro trillar sin tregua, es ejemplo de que sí es posible contribuir a la regeneración aunque el camino ni esté hecho ni sea fácil de andar. Los versos de Machado siempre presentes.
1.900 notas son muchas horas de dedicación, esfuerzo y reflexión continuada. Vuestra siembra germinará hasta en la roca. Gracias.

Anónimo dijo...

Una y 1900 veces más, GRACIAS por tanto compromiso, dedicación y esfuerzo desinteresado.