lunes, 25 de marzo de 2013

REPENSAR EN SEMANA SANTA: MENSAJE DE JULIO GUIRAL.







Seis años son bastantes en la vida de una asociación, y más en una atípica de funcionarios que no recibe dinero público y en la que los socios han sufragado pacientemente los gastos.

Nadie imaginó, cuando se constituyó, el alcance  de los conflictos, juicios y sentencias en los que nos hemos implicado (¿complicado?), ni tampoco la tenacidad con la que políticos, gobernantes y funcionarios de todos los niveles nos han ignorado o la obstinación de los responsables de la Administración en incumplir la ley y las sentencias judiciales firmes, por no citar las recomendaciones de los órganos de control.

El ecosistema político-administrativo es complejo, jerárquico y autoritario (también los de abajo lo somos en gran medida) y nos hemos empeñado en contribuir a simplificarlo, democratizarlo y ajustarlo al cumplimiento de la ley y de las normas éticas, escritas o no.

Hemos conseguido algunos avances en sentencias y recomendaciones, no del todo bien conocidas, no tanto por no haberlas divulgado, sino por la acción de los temporalmente poderosos ¡Cuatro años de legislatura son largos a menudo para los que sufren las decisiones ilegales y dolorosas!

No hemos logrado reunir más que a unos pocos y hemos sufrido bajas impensables, aunque contamos con notables refuerzos gracias a la incorporación de nuevos miembros.

Los problemas de la función pública siguen, se han incrementando en una gran parte por el incumplimiento de la ley y en otra parte por decisiones de coyuntura, precipitadas, nunca explicadas ni justificadas suficientemente, en medio de escándalos mayúsculos en los que intervienen ciudadanos ávidos de poder, demasiados políticos predispuestos a cobrar el botín personal o partidista y una  función pública que en unos casos aparece como perpleja y en otros de espectador, de cómplice o de convidado de piedra.

Sufrimos también a muchos dirigentes sindicales en la función pública, antes orgullosos y prepotentes, ahora a la deriva, sin una propuesta creíble que no sea que nos quedemos como estábamos.

La mutación es inevitable y hay que intervenir en la selección de las mejores soluciones, que no podemos dejar solo en manos de las élites (una veces reales, lo son; otras ficticias, creen erróneamente pertenecer a ellas). Por  eso es imprescindible la continuidad de la acción de nuestra Asociación –es decir, de sus socios-, con un programa basado en criterios y actuaciones sobre el buen gobierno y la buena administración, a favor de la transparencia y frente a los corruptos y corruptores, que ya trazamos en el 2011 y que, en gran parte, permanece oculto a la sociedad. Debemos preguntarnos: ¿no lo hemos trasladado a los funcionarios y a los ciudadanos con el suficiente convencimiento porque no confiamos en lo que escribimos?

Esta  es la reflexión reservada para los días festivos y religiosos, que darán paso a una asamblea extraordinaria de la que no puede salir -en el contexto de extrema emergencia social en la que estamos- más que un mayor y mejor compromiso de actuación como socios, mejores métodos de trabajo colectivo (los conocemos y manejamos con soltura,  pero.....), una mayor presencia en los medios y ante los funcionarios, y la mayor y mejor cooperación con otros grupos de ciudadanos también implicados en conseguir el mejor gobierno y la buena administración y el resto de objetivos compartidos. Y esperemos que acudiendo menos veces a la justicia.

Todo con un poco de buena voluntad, estudio, reflexión y decisiones oportunas, y dejando de lado la prepotencia  y la vanidad.

Julio Guiral, Presidente de la Asociación (2007-2013).

6 comentarios:

Anónimo dijo...

No veo asomo de desánimo, lo que me alegra. Enormemente.

Anónimo dijo...

Aguantar seis años es todo un mérito.

Anónimo dijo...


Más lo sería aguantar otros seis.

Alfonso dijo...

Gracias, Julio, por tu dedicación durante estos años.

Anónimo dijo...

Buena reflexión para estos días ... las grandes obras necesitan de grandes hombres, aquí tenemos uno

Anónimo dijo...

Pienso lo mismo ahora que releo esta nota, ahora que ha pasado la semana Santa .