viernes, 31 de diciembre de 2010

FINAL DE AÑO: PUNTO Y SEGUIDO EN LA DEFENSA DE LA FUNCIÓN PÚBLICA.

Llega el final de año, en medio del paréntesis navideño, y esta Asociación deja el balance de su actividad para lo que constituye su verdadera cita anual, es decir, la asamblea general de socios que se celebra, cada año, en los meses de febrero o marzo. Nos limitaremos a constatar en esta fecha que durante el año que concluye, y a falta de calibrar los efectos que ello pueda tener en el futuro, esta Asociación no sólo ha tratado de mantener su actividad, como en años anteriores, sino que ha realizado un esfuerzo para abrir su campo de acción a otras Administraciones y a otros territorios.

La doble apertura de la Asociación se ha llevado a cabo, en primer lugar, con el cambio de sus Estatutos, al abrir su ámbito al resto de las Administraciones aragonesas -algo que hasta el momento apenas ha tenido repercusión, pero que abre una innegable perspectiva de futuro, al tratar de incorporar a las iniciativas hasta ahora desarrolladas lo que concierne al mundo de la administración local aragonesa, con su problemática específica-, y, en segundo lugar, con el inicio de relaciones de colaboración y articulación con otras entidades y plataformas que trabajan por objetivos directamente conectados con sus fines estatutarios o que circunscriben su acción -materialmente coincidente- al territorio de otras Comunidades Autónomas.

Ejemplos de esta segunda apertura son la incorporación a la Coalición Pro Acceso, conjunto de organizaciones que propugnan una ley de acceso a la información pública como mecanismo de transparencia en la gestión pública, y los contactos mantenidos con asociaciones de funcionarios asturianos y andaluces que se han organizado para promover y defender, al igual que nosotros, la profesionalidad de la función pública en sus respectivas Comunidades Autónomas. Confiamos en impulsar y ver, en un futuro próximo, una amplia plataforma de organizaciones de todas las Administraciones Públicas españolas trabajando en la misma dirección.

Otro dato que no podemos minimizar en este momento es la fase de normalización de relaciones que ha impulsado desde la Dirección General de la Función Pública su nuevo titular, Jesús Sarría, que ha reiterado -en los dos encuentros mantenidos en el último mes- su voluntad de mantener reuniones monográficas con los representantes de esta Asociación para abordar diferentes aspectos de la realidad de la función pública aragonesa. Si la apertura, en este caso, ha procedido del actual responsable de la Dirección General de la Función Pública -cosa que reconocemos y agradecemos-, creemos que la respuesta de diálogo ofrecida, desde el primer momento, por esta Asociación ha evidenciado su clara voluntad de colaboración con los responsables de la Administración para avanzar en propuestas de futuro, sin que ello implique la renuncia a exigir el respeto de la ley, factor fundamental de una Administración en un Estado de Derecho.

Finalmente, no debemos olvidar que este año, por tercera vez, la Asociación celebró el 9 de diciembre el Día Internacional contra la Corrupción, así establecido por Naciones Unidas para difundir los compromisos que contiene la Convención contra la Corrupción aprobada en 2003. La reivindicación de la ética pública, como elemento central de toda la actividad de la Asociación, no podía tener otro resultado que el asumir como objetivo prioritario la acción contra la corrupción pública, sea política o administrativa. Una línea que esta Asociación no hará sino reforzar en el futuro.

El año 2011, en definitiva, no sólo es tiempo en el que proyectar todas las líneas de trabajo iniciadas -este final de año no es más que un punto y seguido en la labor que esta Asociación viene desarrollando-, sino que, además, al ser un año electoral -con elecciones sindicales dentro de la Administración autonómica y elecciones locales y autonómicas, de las que saldrá la nueva composición de las Cortes de Aragón y surgirá el nuevo Gobierno de Aragón- es un tiempo de responsabilidad y de propuestas, tanto por la cita electoral del próximo mes de mayo como por las circunstancias de dificultad que vive nuestro país, que obligan a ejercer con especial exigencia las responsabilidades que como ciudadanos y servidores públicos nos corresponden.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No es mal balance, y parece que hay ánimo de sobra para seguir en este año.